sábado, 5 de junio de 2021

MITOLOGIA EGIPCIA

AMAMET
Era el dios que, tras la celebración del juicio en el más allá, devoraba al culpable. Aparecía como una deidad monstruosa dotada de rasgos de león, hipopótamo y cocodrilo.


AMÓN-RA
Amón era un nombre helenizado procedente del egipcio Amen o Imen y equivalía al griego Zeus. Originalmente fue la deidad tebana del aire, o de la fecundidad, y se le representaba como una figura antropomorfa de piel negra azulada o en forma de animal con cabeza de carnero. En ambos casos mostraba un tocado compuesto por dos plumas y un disco solar. En otras ocasiones, cuando se presentaba como dios creador, aparecía con aspecto de momia. También podía encontrarse en forma de serpiente, león u oca.
Su nombre significa “dios oculto”, como manifestación de los aspectos desconocidos y misteriosos de la divinidad ya que podía sentirse, pero no verse y era el que atendía generosamente las súplicas de sus devotos.
Era un dios sin historia propia y por ello asimilaba las de otras divinidades.
La primera mención conocida sobre él aparece en los “Textos de las Pirámides” donde figuraba como dios del aire, pero cuando Amenemhat I fundó la XII dinastía del Imperio Medio (c. 2000 – 1800 a. C.), y Tebas se convirtió en la capital de Egipto, fue elevado a la categoría de dios primordial, el Rey de los Dioses, postergando al dios guerrero Montu, y se le erigió el templo de Karnak.
Se creía que el faraón únicamente había podido reunir a todo Egipto bajo su autoridad con el apoyo del dios creador y organizador del mundo.
Su culto se popularizó cuando Tebas alcanzó su máxima influencia en Egipto, tras la expulsión de los hicsos por los príncipes tebanos fundadores de la Dinastía XVII.
Los sacerdotes de Amón se convirtieron en el sector más influyente de la sociedad egipcia durante el Imperio Nuevo, llegando incluso a enfrentarse Amenhotep IV (Ajenatón), llamado el faraón herético. En esta época comenzó su identificación con Ra, bajo la denominación Amón-Ra.
En el período tardío adquirió un carácter más universal, siendo conocido por el nombre griego de Amón-Ra-sonter “Amón-Ra, rey de los dioses”.
Fue denominado “El oculto”, “Padre de todos los vientos”, “Alma del viento”, “Aquel que habita en todas las cosas”, “Señor de las dos tierras”, “El eterno”.
Una característica del panteón egipcio era la costumbre de agrupar a sus dioses en tríadas formadas normalmente por una pareja con un hijo. En Tebas, la triada la constituían Amón, su esposa Mut y su hijo Jonsu.

ANUBIS, el embalsamador.
Su procedencia es incierta ya que en los primeros textos religiosos no se mencionaban sus progenitores. En los “Textos de las Pirámides” figura Qebehut, diosa purificadora de los difuntos, como su hija. En los “Textos de los Sarcófagos”, se menciona a Bastet o Hesat como su madre y en otros textos era hijo de Ihet.
Según Plutarco, Anubis era hijo de Osiris y Neftis. Ésta quedó embarazada al mantener relaciones con Osiris cuando el dios se encontraba embriagado, según unas versiones, o porque Neftis se disfrazó de Isis, según otros textos.
Seth, al enterarse del nacimiento de su hijo ilegítimo, decidió asesinarlo, pero Neftis salvó al recién nacido entregándoselo a Isis, la hermana y esposa de Osiris, quien lo protegió y crió. Cuando Seth mató a Osiris descuartizándolo, Anubis ayudó a Isis a recuperar las diversas partes del cuerpo, a reconstruirlo y embalsamarlo. Por este motivo, Anubis era el encargado de embalsamar a los faraones y conducirlos a la necrópolis.
Fue un dios funerario protector de las necrópolis y patrón de la ultratumba, en donde tenía como tareas la custodia del palacio de Osiris y vigilar, junto a Thot, el pesaje del corazón del difunto.
Se le representaba como un chacal en posición de esfinge, o bien como una figura humana con cabeza de chacal.
Anubis era el antiguo dios de la Duat (mundo de los muertos) y estaba relacionado no sólo con la muerte, sino también con la resurrección y se le mostraba en color negro, color que representaba la fertilidad.
Cuando Osiris alcanzó la primacía en la Duat, Anubis quedó relegado a un papel secundario limitándose a embalsamar los cuerpos de los faraones, guiarlos a la necrópolis y cuidar de ésta. Los sacerdotes de Anubis usaban unas mascaras rituales con su figura en la ceremonia de embalsamamiento del faraón.

APIS
Era el Toro sagrado de Menfis. Su piel era de color negro con manchas blancas en la frente y en el lomo y se le representaba con un disco solar entre los cuernos. Se cree que Ptah, con la apariencia de un rayo de luz, cubrió a una vaca virgen y con ella concibió un toro negro que se convertiría en la manifestación del dios. El ser concebido mediante un rayo de luz fue la causa de que se considerara sucesivamente como hijo del Sol, como manifestación de Ptah y como reencarnación de Osiris. Tenía asignado un corral dentro del templo y allí recibía las ofrendas. Cada año se festejaba su nacimiento durante siete días y cuando moría era embalsamado y el luto duraba setenta días, transcurridos los cuales, los sacerdotes salían en busca de un sucesor.

APOFIS
Era la representación de las tinieblas y de las fuerzas maléficas que habitaban el Duat.
Se trataba de una serpiente gigantesca dotada de un gran poder e indestructible, cuya función consistía en tratar de interrumpir el recorrido nocturno de la barca solar de Ra para evitar que alcanzara el nuevo día y así romper el orden cósmico establecido por el demiurgo. Los egipcios consideraban que la existencia de la monstruosa Apofis, como representación del mal, resultaba imprecindible para que el bien pudiera manifestarse. Se le atribuían los eclipses y se pensaba que si el cielo se teñía de rojo era a causa de la sangre que brotaba de las heridas del monstruo.

ATON
Nombre del disco solar originario de Heliópolis. Amenofis IV (Ajenaton), hizo desaparecer todas las demás divinidades, y solo creía en ésta.

ATUN
Encarnaba al Sol poniente con la apariencia de un anciano, pero portador de promesas de vida futura.

BASTET
Era la personificación de los rayos del Sol ejerciendo sus poderes benéficos. Se representaba como una mujer con cabeza de gato o como un gato. Como ojo de Atum, estaba asociada a la Luna y protegía los nacimientos, al igual que a las embarazadas, de las enfermedades y de los malos espíritus.

BES
Protector de las parturientas y ahuyentador de los malos espíritus. Se representaba como un enano de rostro chato y leonino.
Era un dios alegre y en algunas representaciones se mostraba tocando un instrumento musical de viento. Gobernaba el sueño y las iniciaciones mistéricas. Su figura, a pesar de ser horrorosa, adornaba muchos lechos, objetos de uso femenino y amuletos.

GEB
Personificaba la tierra y aparecía como un hombre tendido en el suelo intentando unirse a su esposa celeste. Estaba asociado al ganso, cuyo signo se utilizaba para escribir su nombre.
Era hijo de Shu y de Tefnut y fue el tercer faraón egipcio tras Shu y Ra. Se unió con su hermana Nut, diosa del cielo, pese a la prohibición de Ra, y engendró a Isis, Osiris, Seth, y Nephtis, con los que formaba parte de la Gran Eneada. Se le representaba con apariencia humana y con la cabeza ceñida por la corona roja del Bajo Egipto, o bien con el símbolo de la oca, ideograma de su nombre. Reinó con sabiduría durante muchísimos años antes de subir al cielo, en donde, según el “Libro de los Muertos”, se hizo juez y heraldo de los dioses y cedió el cetro faraónico a su hijo Osiris.

HAPI
Era la personificación del Nilo. Los antiguos egipcios creían que las aguas de Hapi nacían en una caverna situada en la isla de Bigeh, próxima a la primera catarata.
Se representaba como hombre barbudo, con barriga prominente y la piel de color verde o azul imitando el color del agua. Llevaba un tocado con las plantas heráldicas del Alto y Bajo Egipto y, a veces, en vez de cabeza humana aparecía con dos cabezas de oca. Poseía algunas características femeninas, como los pechos abundantes y caídos por lo que le se reputaba como hermafrodita. Era la idealización de la fecundidad y de la fertilidad.

HATHOR
Era la diosa del Cielo egipcia, que los griegos identificaron con Afrodita. Se la consideraba como hija de Ra y Nut, aunque en otras versiones aparece como esposa de Ra y madre de Horus. Su nombre significaba “la morada de Horus”, lo que se explicaba con la creencia de que el Sol se introducía en su seno durante la noche para renacer al día siguiente.
En los textos egipcios se decía que era la gran vaca primordial que había creado el mundo y todo cuanto contiene, incluso el Sol. Por ello se la representaba en forma de vaca, bien con cuerpo de diosa y cabeza de vaca, o simplemente con cabeza humana y grandes trenzas que encuadraban su rostro. Además tenía orejas de vaca y cuernos sosteniendo un disco solar.
Era la protectora de las mujeres gozando de gran popularidad como diosa del amor y de la alegría. Se la proclamaba “dueña de la alegría, soberana de la danza, ama de la música, señora del canto, reina de los saltos y patrona del enlazamiento de las guirnaldas”. Y su templo era “mansión de la embriaguez y lugar de la vida agradable”. Se mostraba benévola con los vivos y aún más con los muertos. Con el título de “reina de Occidente”, era la protectora de las necrópolis.
También era llamada la “Dama del sicomoro”, porque escondida entre las hojas de este árbol, en los límites del desierto, salía para ofrecer a los muertos el agua y el pan de bienvenida. Se decía también que ella era la que sostenía la larga escalera por la cual los justos ascendían al Cielo.

HORUS
En un principio, Horus era considerado como el hijo de Ra, esposo de Hathor, hermano de Seth y fundador de las dinastías faraónicas. Se representaba con cabeza de halcón y sus ojos era el Sol y la Luna. Reinaba en los espacios aéreos y cuidaba la aplicación de las leyes. Era el guardián de los pueblos y aparecía en el “Libro de Los Porches” como un pastor apoyado en un largo báculo.
En el transcurso del tiempo, se transformó en el hijo de Isis y Osiris. Seth, celoso de la creatividad benéfica de su hermano Osiris, lo asesinó, desmembró su cuerpo y esparció los trozos por el orbe. Isis, esposa y hermana de Osiris, pudo reunir las partes y, rehaciendo el cuerpo con la ayuda de Anubis, consiguió quedar fecundada de su esposo. De esta unión póstuma nació Horus, quien se propuso vengar la muerte de su padre enfrentándose a su tío. En un duro combate, perdió un ojo, la Luna, pero consiguió castrar a su enemigo. Tras el combate, recuperó el Bajo Egipto, permaneciendo Seth dueño del Alto Egipto. No obstante, pronto pasó a ser el dueño de toda la tierra, quedando Seth como rey de los bárbaros. Horus representaba la luz y Seth las tinieblas.

IHET
Era una divinidad adorada en Esna, capital de tercer nomo del Alto Egipto situada al sur de Luxor, de la que se decía que flotaba sobre las aguas al comienzo del mundo y que era “más antigua que todos los dioses”. Ihet, como diosa única y creadora, fue identificada con el océano primordial por lo que Nun sería su hijo. Dio a luz al Sol, al que colocó entre sus cuernos para protegerlo de los ataques de Apofis. También se la consideraba como una diosa guerrera, “Señora del desierto” y “Señora de los países extranjeros”.
Era protectora de los difuntos, a quienes daba calor y su imagen se ponía en los discos de papiro colocados bajo las cabezas de las momias en la Época Tardía. En Heliópolis era la madre de Ra y un mito la muestra como madre de Anubis. Se representaba en forma de vaca, o mujer con cabeza de vaca.

ISIS
Es el nombre griego de la diosa Ast. Se la representaba de diversas formas: como mujer con un ajustado vestido y el jeroglífico del “trono” sobre su cabeza. Sedente con un tocado en el que aparecía el disco solar como le correspondía por ser hija de Ra. Con alas de milano y brazos abiertos bendiciendo a sus devotos simbolizando la maternidad. Con forma de árbol amamantando a Horus.
A comienzos de la dinastía XVIII, y en el período tardío, estaba representada con cuernos y un disco solar entre ellos, atributos de la diosa Hathor.
Era mitológicamente la esposa y hermana de Osiris y la madre de Horus y fue venerada como la esposa y la madre arquetípica. Plutarco narró su historia:
Osiris, hermano y esposo de Isis, reinaba en el antiguo Egipto con paz, armonía y sabiduría. El Nilo fertilizaba la tierra y las cosechas eran abundantes por lo que sus súbditos estaban felices. Un día, Osiris salió de viaje para conocer otras civilizaciones y dejó el reino bajo el mando de su esposa Isis. Seth, su envidioso hermano, se sintió humillado pues creía que él debería gobernar y no Isis.
Cuando el dios Osiris volvió, Seth quiso hacer una gran fiesta de bienvenida y lanzó un desafío a los invitados: el que entrase en el cofre que Seth había traído, lo recibiría como regalo en prueba de fidelidad y respeto. Muchos intentaron pero el cofre resultaba pequeño o grande. Osiris, curioso, quiso probar y le encajó perfectamente. Seth sabía el tamaño del hermano e construyó el cofre a su medida. Inmediatamente el hermano, y sus setenta y dos cómplices, cerraron la caja de metal herméticamente y la arrojaron al Nilo.
Isis se propuso recuperar el cuerpo de su esposo y, tras padecer muchas penalidades en su búsqueda por todo el territorio egipcio, encontró el cofre con los restos de Osiris. Sin embargo, el pérfido Seth robó el cadáver y lo descuartizó haciendo catorce trozos que esparció por todo el reino. Isis no se dio por vencida y, en compañía de su hermana Neftis, consiguió recuperar el cuerpo a excepción del pene. No obstante, Isis reconstruyó a Osiris ayudada por Anubis y Neftis, e inseminada de su marido por artes mágicas concibió a Horus quien, posteriormente, vengaría a su padre luchando contra Seth.
Recibió muchos epítetos: “Gran maga”, “Gran diosa madre”, “Reina de los dioses”, “Fuerza fecundadora de la naturaleza”, “Diosa de la maternidad y del nacimiento”, “La Gran Señora”, “Diosa madre”, “Señora del Cielo, de la Tierra y del Inframundo”, “Isis en todas sus manifestaciones”, “Señora de Raanefer”, “La reina de Mesen”, “Señora de Hebet”, “Señora de Abaton”, “Señora de los países del sur”, “Señora de las pirámides” en Giza, “la divina, la única, la más grande de entre los dioses y diosas, la reina de todos los dioses”, “el Ojo de Ra, la corona de Ra-Heru, Sept”, “Señora del Año Nuevo”, etc.

KHEPRI
El nombre significaba “el escarabeo” o “aquél que surge”. En los “Textos de las Pirámides” aparecía como el Sol naciente y se representaba en forma humana con un escarabajo en la cabeza. También aparecía como un coleóptero que impulsaba con sus patas delanteras al disco solar en su recorrido por el cielo. El símbolo del escarabajo estaba sobre los amuletos y en los sellos del rey.

KHNUM o CNUM
Se le adoraba como guardián de las fuentes del Nilo en Elefantina y otros lugares próximos a la primera catarata. Era el dios de las aguas que circulaban por el mundo inferior y cuando el Sol navegaba en la oscuridad de la noche se unía a Cnum. Junto a las divinidades locales, Anukis y Satis, formó una tríada cuyo culto se prolongó hasta la época tardía. Se le asoció a Ra con el nombre de Khnum-Ra y, según una leyenda, creó al primer hombre de arcilla moldeándolo con una rueda de alfarero, por lo que también se le considera como patrón de los especialistas de la alfarería. Se creía que este dios había modelado el huevo primordial de donde salió la luz solar al inicio de los tiempos. Está representado mediante una figura antropomórfica con cabeza de carnero.

KHONSU O JONSU
Era el dios lunar que, junto a sus padres adoptivos, Amón y Mut, formó la tríada tebana. En los Textos de las Pirámides se le citaba como un dios sanguinario que ayudaba al faraón en la captura y muerte de otras divinidades para que el soberano se alimerntara de ellas y obtener su poder. En Menfis aparecía como hijo de Sokar y Hathor y en otros sitios se decía que era hijo de Sobek y Hathor. Protegía a los enfermos y cuando hacía salir la luna llena, las mujeres y el ganado eran más fértiles. Como dios lunar estaba relacionado con el tiempo y en sus manos llevaba una rama de palmera que servía para medirlo. Sus imágenes representativas varíaban según los lugares donde recibía culto. Unas veces lo mostraban momificado, como Ptah, con sus manos saliendo de las vendas sosteniendo un cetro y el mayal (cayado) como símbolos propios del faraón. En otras iconografías tenía el rostro de muchacho y la cabeza coronada por el creciente lunar bajo el disco de la Luna.

MAAT
Esta diosa estaba representada como una mujer, de pie o sentada, con una gran pluma de avestruz en la cabeza, sujeta con una diadema. Considerada hija de Ra, Maat aparecía detrás de su padre, en la barca que le llevaba cada noche al mundo subterráneo. Representaba el equilibrio y la armonía del universo tal y como fue creado. En la sociedad, el respecto por el equilibrio implicaba la práctica de la lealtad, verdad y justicia. Vigilaba los tribunales e intervenía en el juicio funerario colocándose en el platillo derecho de la balanza, mientras que en el izquierdo se depositaba el corazón del difunto. Si la balanza permanecía equilibrada, el difunto se había comportado honestamente y su corazón pertenecía a Maat, en caso contrario, era engullido por un monstruo llamado “la Devoradora de Poniente”.

NEFERTEM
Se le representa con un tocado de flor de loto de la que nació.

NEFTIS
Era hija de Gueb y Nut y esposa de Seth. Ayudó a Isis a localizar el cadáver de Osiris y a recomponerlo. Fue ocasionalmente amante de Osiris y de esa relación nació Anubis. Neftis era llamada la “Dama de la Casa” y sobre la cabeza llevaba el signo de la casa-tumba que simbolizaba su nombre. Se le atribuían poderes mágicos y se creía que habitaba en el desierto donde actuaba como guía de los viajeros. Estaba asociada al culto funerario y las vendas que envolvían los cuerpos de los difuntos representaban sus cabellos. Era la protectora del Sol naciente frente a la serpiente Apofis.

NEIT
Diosa guerrera y de la caza. Sus atributos eran el arco, las flechas y el escudo. Se le atribuía el cometido de proteger a Osiris, Ra y el faraón. Se decía que con sus flechas adormecía a los malos espíritus

NEJBET
Era una diosa solar que protegía al faraón. En el Texto de las Pirámides se le citaba con el apelativo de “Corona blanca” y se identificaba con el buitre que se convertía en el animal simbólico del Alto Egipto.

NUT
Conocida como la diosa del cielo, era hija de Shu, el aire, y Tefnu, la humedad y esposa-hermana de Geb, la tierra. Nut también aparecía en el panteón egipcio como la diosa creadora del universo físico y como la reguladora de los movimientos de los astros por lo que se le conocía con el título de “la grande que da el nacimiento a los dioses”. Se la representaba como una bóveda celeste en forma de una mujer inclinada sobre la Tierra y apoyándose en ella con los pies y las manos. Se creía que por la noche engullía al Sol y lo hacía renacer a la mañana siguiente.

OSIRIS
Era hijo de Nut y Geb y hermano de Isis, Neftis y Seth. Reinaba en el mundo subterráneo que contenía las semillas de la vida. Se le consideraba como protector de los difuntos y dios de la vegetación, así como el Sol en su recorrido nocturno, lo mismo que Ra lo era en su recorrido diurno.
Le correspondió el derecho a gobernar la Tierra por herencia de su padre. Sin embargo, su destino estaba marcado por la traición y la muerte, pero también por el amor excepcional de una mujer. Osiris extendió por todo el mundo la civilización y fue enseñando a los humanos todas las cosas buenas que existen provocando la envidia de su hermano Seth que lo asesinó y despedazó. Isis, su esposa, recuperó las partes del cuerpo, a excepción del pene, y las unió consiguiendo ser fecundada de forma mágica para dar a luz a Horus.
La muerte y resurrección simbolizaban la sucesión de las estaciones y permitían a los hombres esperar una nueva vida. Como dios de la vegetación, Osiris daba los frutos de la tierra. Como dios dominante, enseñaba el respeto a los dioses y el uso de los ritos. Como dios soberano, aportaba las leyes y las costumbres. Se representaba habitualmente con el Atef, corona que lleva dos grandes plumas. Era una momia verde, siendo el verde el signo de fertilidad. Sus brazos estaban cruzados sobre el pecho y portaba los signos de soberanía: el cetro del rey, el látigo del juez y el bastón de la larga vida. Isis y Neftis estaban a cada lado agitando sus alas para devolverle el soplo de vida.

PTAH
Era un dios creador anterior al Sol que dio origen a la Tierra, y todo cuanto existía, combinando el deseo de su corazón (espíritu y voluntad) con el poder de su verbo. El corazón concebía la idea y su palabra ejecutaba los actos necesarios para que se materializara. Era el padre de la humanidad y fue proclamado dios principal de Menfis y con su esposa, Sekmet, y su hijo, Nefertum, formaba la triada que gobernaba la ciudad.
Era considerado como el protector de los artesanos, metalúrgicos, constructores y escultores y se le representaba con figura humana enfundado en una vestidura ceñida y tocado con un gorro y un cetro.
Más tarde apareció como un dios curador adoptando la forma de un enano con el cráneo aplastado como la de un genio protector.

RA
Era la máxima divinidad egipcia que emergió del Océano Primordial y asumió el nombre de Ra convirtiéndose en dios único creador del resto de los dioses. Utilizando su cuerpo engendró a Shu y Tefnut, de los cuales nacieron Geb y Nut, que a su vez dieron la vida a Isis, Osiris, Seth y Neftis.
Asumiendo la doctrina astral de la era predinástica, fundamentada sobre las estrellas, Ra se convirtió en dios solar recibiendo el culto de la religión aristocrática del período más antiguo.
El dios reinó durante muchos años sobre Egipto, pero desilusionado de su reino terrenal mítico y disgustado por la traición de aquellos a los que había beneficiado con su sabiduría, decidió abandonar la tierra y subir al cielo para castigar al género humano. Desde allí envió a su Ojo divino que, asumiendo la apariencia de la diosa Hathor, exterminó gran parte de la humanidad ganándose el epíteto de Sachme, la Poderosa.
Su nombre era una de las tres denominaciones del Sol. Al anochecer, cuando se hundía hacia el Oeste, era Atum, el anciano encorvado esperado en el más allá por los muertos que se calientan con sus rayos. Al amanecer volvía a la vida por el Este en forma de escarabajo y recibía el nombre de Khepri. Durante el día iluminaba la Tierra adquiriendo forma de halcón y se le conocía como Ra. Tuvo un culto especial en Heliópolis, donde se representaba con figura antropomórfica y cabeza de halcón, o carnero, coronada por el disco solar
En época tardía, Ra se asoció a las divinidades Amón, Atón, Khnum, Sebek. Con la forma de Amón-Ra el dios se convirtió en la divinidad suprema de toda la religión egipcia. Se le atribuyeron algunas esposas, entre las que figura Rait, contrapartida femenina de su nombre, y Uert-Hekeu.

RENENUTET
Era conocida como “la diosa serpiente” y cumplía funciones benéficas, pese a que en Egipto las serpientes eran consideradas como divinidades maléficas. Se le representaba con cabeza de serpiente y era protectora del niño real. También era la diosa de la suerte vinculada a la fertilidad y a las cosechas. A ella se le dedicaban las primicias de la lluvia, vino, cerveza y pan.

SACMIS
Era hija de Ra y se la consideraba una manifestación del ojo del dios. Llevaba el disco solar y el ureo sobre la cabeza y simbolizaba la energía destructora del Sol por lo que se le rendía culto como diosa de la guerra. Causaba espanto en el mundo y en el más allá, donde Seth y la serpiente Apofis sucumbían ante ella. Su nombre egipcio era Sejmet, que significa “la poderosa”. Esta diosa atacó despiadadamente a los humanos, pero Ra quiso impedir su aniquilación para lo que hizo que la diosa fuera engañada ofreciéndole siete mil vasijas de cerveza mezclada con tinte rojo. Sacmis, creyendo que era sangre, bebió y se embriagó, y la raza humana logró sobrevivir. Se representaba como una leona, o como una mujer con cabeza de leona.

SELKIS
Era la diosa protectora de las picaduras de escorpión y se representaba como mujer con un escorpión en la cabeza o con un cuerpo de escorpión.
Era la protectora, junto con Isis y Neftis, de uno de los vasos canopos (recipiente donde se depositaban las vísceras de los difuntos una vez lavadas y embalsamadas), y del sarcófago del faraón,

SESHAT
Era la diosa encargada de contabilizar el tiempo escribiendo los años de reinado del faraón en las hojas del árbol de Persea (árbol sagrado de Heliópolis). Estaba asociada a los arquitectos y aconsejaba sobre la fundación de templos. Tenía una estrella de cinco puntas en la cabeza y llevaba en las manos una caña de palmera.

SETH
Era hijo de Geb y Nut y personificaba la tierra baldía y la sequía. Simbolizaba las fuerzas destructoras de la Naturaleza y, en especial, las tormentas, considerándose que el trueno era su voz. Era el asesino de Osiris y constituía una amenaza constante para el orden cósmico. Se le representaba como una especie de galgo con largas orejas recortadas, hocico levantado y un prolongado rabo bífido.

SHU
Era el dios del aire, hijo de Ra y esposo de Tefnut. Aparecía representado, a veces, con la forma de un león, pero en general se mostraba como un hombre tocado con una pluma de avestruz o con cuatro plumas derechas y sosteniendo el cielo. En algunos amuletos sostenía el sol.
Según la tradición, Shu sucedió a su padre en el gobierno de Egipto. Más tarde, enfermo y cansado, dejó el poder a su hijo Geb.

SOBEK
Era considerado como el dios-cocodrilo y en el Texto de las Pirámides se mencionaba como hijo de Neit. Se le creía emergido de las aguas primordiales del caos en la creación del mundo. Era temible por su voracidad ya que engullía los enemigos que habitaban en el mundo acuático.
En algunas localidades de Egipto se asociaban los cocodrilos a los demonios y a las fuerzas devastadoras del dios Seth quien, tras haber asesinado a su hermano Osiris, se había transformado en cocodrilo para escapar al castigo divino. Sin embargo, en los Textos de las Pirámides y en el Libro de los Muertos aparecía como espíritu benefactor. Se le representa con aspecto zoomórfico, pero también con forma humana y cabeza de cocodrilo adornada por el disco solar, el áureo y las dos plumas.

THOT
Era el dios de la escritura, de las bibliotecas, de la lengua y el señor de las palabras divinas. Representaba las matemáticas, la astronomía y las ciencias en general, por lo que simbolizaba la sabiduría y se le consideraba como el señor de los discursos convincentes, de la astucia y de la magia. Podía aparecer representado como babuino e ibis o bien con cuerpo humano y cabeza de ibis o de babuino. En cualquier caso siempre estaba acompañado por material de escritura. Thot era abogado y dios de las leyes estando muy relacionado con la diosa Maat como representante de la verdad y la justicia. Thot se servía de la astucia y de la magia en los casos difíciles. Ocupaba una posición importante en el tribunal divino.
Como escriba actuaba de secretario de los dioses. Se le identificaba con la Luna porque su recorrido por la bóveda celeste dependía de una compleja ciencia numérica que sólo él dominaba. Thot dividió el tiempo estableciendo el calendario y controlaba la escritura de la historia. Legalizaba el nombre del faraón escribiéndolo en el Árbol de la Historia en el templo de Heliópolis y estudiaba los lugares destinados a edificar los templos asegurando su construcción según los planos.
Como juez, Thot dictaba las leyes, controlaba las cuentas y el Libro de la Vida. Él era quien comprobaba el equilibrio de la balanza en el día del juicio de los muertos.

TUERIS
Era una diosa muy vinculada al nacimiento. Se representaba como un hipopótamo hembra, con cola de cocodrilo, patas de león y pechos muy grandes. Era diosa protectora de las embarazadas y su figura aparecía en las camas y en los vasos para poner leche. Su nombre significaba “la grande”.

UADYET
Era una diosa que encarnaba el calor del Sol y recibía el sobrenombre de “dama del cielo”. Cuando aparecía representada como cobra, era el símbolo la corona roja del Norte, y el ojo izquierdo del dios del Sol.


UPUAT
Su nombre significa “el abridor de caminos”, fue dios de Licópolis, capital del nomo XIII del Alto Egipto, y era representado como un lobo erguido o un hombre con cabeza de lobo.

No hay comentarios: