MITOLOGIA MEDO-PERSA

ABAN

Era un dios que gobernaba el agua y también el nombre del octavo mes y del décimo día de cada período mensual según el calendario de la religión de Zoroastro.

AESMA DAEVA

Era el demonio de la cólera empuñando su maza ensangrentada y al que se refiere el Libro de Tobías con el nombre de Asmodeo. Era una de las criaturas que formaba parte del séquito de Ahrimán.

AHRIMÁN

Era hijo segundogénito de Zervan Akarana, el ser supremo, quien había decidido que el primero en nacer de sus dos hijos gemelos sería el rey del Universo y tendría el don de conocer el futuro. El primero en nacer fue Ahura Mazda, conocido también como Spenta Mainyu, el completamente espiritual, y más tarde como Ormuz y él recibió los dones de su padre. Ahriman, conocido como Angra Mainyu, el espíritu diabólico, nació tras su hermano y sintió envidia hacia él. La pasión envidiosa dio origen al dualismo en el que el primero fue el dios de la luz y el segundo el de las tinieblas. Ahriman fue el creador de la maldad y portador de la muerte y de la enfermedad y se le conocía como la personificación del mal. Lideraba las fuerzas malévolas que se enfrentaron, en un conflicto cósmico, a las benéficas, comandadas por Ahura Mazda las celestiales y por Zoroastro las terrenales. Ahrimán era el que producía las heladas invernales, el calor en verano y cualquier tipo de enfermedades u otros males para molestar a Ahura Mazda. Cuando Ahura Mazda creó los cielos, Ahriman dio vida el dragón Azi Dahaka, que trajo la ruina a la Tierra y que subió al cielo como una serpiente creando los planetas sin luz propia en contraposición con las estrellas creadas por Ormuz que sí la tenían.

Ahrimán vivía en un lugar llamado la Casa de las Mentiras en el que reinaba la oscuridad y donde irían las almas de todos aquellos poseídos por la enfermedad del mal. Su símbolo era la serpiente.

Junto a él moraban una serie de criaturas como:

Aka Manah, el pensamiento del mal.

Drugh, la mentira, causante del desorden.

Nasu, la mosca que se alimenta de los cadáveres en descomposición.

Azhi Dahaka, el dragón.

Yatu (Jadu), el mago.

Pairika (Pari), las hadas malignas.

Mush, el ratón que devora las cosechas.

Aesma Daeva, el demonio de la cólera empuñando su maza ensangrentada y al que nombra en el Libro de Tobías como Asmodeo.

Az, El demonio de la codicia y la concupiscencia que era considerado como el fundamento de las desdichas terrenales.

Jeh, la prostituta maldita que introdujo entre los hombres el miedo, la envidia, la lujuria y la codicia.

AHURA MAZDA

Personificaba la sabiduría y la bondad. Inicialmente fue llamado Varuna, el cielo, luego Mazda, la sabiduría, y por fusión de ambos nombres se formó el de Ormuz, ya en la Edad Media. Todo lo bueno emanaba de él (ver Ormuz).

AIRYAMAN

Era el dios de la amistad y de la curación.

AKA MANAH

Era el pensamiento del mal y una de las criaturas que formaba parte del séquito de Ahrimán.

AMAHRASPAND

Era el más destacado de los espíritus creados por Ahura Mazda.

AMERETAT

Era la personificación de la inmortalidad y protegía las plantas. El quinto mes se le dedicaba a ella y tenía como eterno rival al demonio de la vejez, Zarich.

ANAGRAN

Su nombre significaba “luz eterna” y era el nombre de un dios que también denominaba el día decimotercero del mes según el calendario religioso de Zoroastro.

ANAHITA

Era la diosa de la fecundidad y a quien los guerreros solicitaban ayuda en las batallas. En Grecia, Anahíta fué identificada con Atenea y Artemisa.

APAUSHA

Era un demonio que producía la sequía y la aridez. Cabalgaba sobre un caballo negro sin pelo y periódicamente era derrotado por el dios Tistrya.

ARAMATI

Personificaba la moderación y su elemento era la tierra.

ASHA

Simbolizaba el orden justo y su elemento era el fuego.

ASHTAD

Era el nombre de un dios que controlaba la justicia y también servía para denominar el vigésimo sexto día del mes según el calendario de la religión de Zoroastro.

ASMAN

Era el nombre del dios que gobernaba el cielo y también se utilizaba para denominar el vigésimo séptimo día del mes según el calendario de la religión de Zoroastro.

ASTWIHAD

Era el demonio de la muerte.

ATAR

Personalizaba el fuego y era hijo de Ahura Mazda.

AZ

Era el demonio de la codicia y la concupiscencia a quien se consideraba como el fundamento de las desdichas terrenales. Formaba parte del séquito de Ahrimán.

AZI DAHAKA

También conocido como Azi Dahak, era un demonio que robaba los ganados y llevaba maldades a los humanos. Se trataba de un monstruo con forma de dragón, o serpiente, de tres cabezas y seis ojos y personificaba la opresión babilónica sobre el territorio persa. Citaba la leyenda que el monstruo será capturado por el dios guerrero Thraetaona y colocado en lo alto de la montaña Dermawend, pero resurgirá y escapará de su prisión, aunque, al final de los tiempos, morirá engullido por el río de fuego Ayohsust.

CHINVAT

Era el nombre del puente que utilizaban las almas para ir al cielo.

DAENA

Era la diosa que presentaba las almas a la muerte al cuarto día después de su separación del cuerpo y las guiaba al cielo o al infierno. Poseía un perro que, mediante el olfato, determinaba si el alma es buena o mala.

DRUGH

Era la mentira causante del desorden. Se trataba de una de las criaturas que formaba parte del séquito de Ahrimán.

GAYOMART

Significaba literalmente la vida que muere y fue el hombre primordial creado por Ahura Mazda. Gayomart vivió como un espíritu durante 3.000 años para después encarnarse en el cuerpo de un apuesto joven viviendo de esta forma durante 30 años. Fue envenenado por Jeh instigada por Ahriman. Su semen fue llevado al Sol donde permaneció 40 años, transcurridos los cuales germinó de él una planta andrógina de ruibarbo que dio origen a Mashye y Mashyane, los padres de la raza humana.

HAURVATAT

Personificaba la salud y su elemento era el agua.

HOOMA

Era el dios que propiciaba salud, descendencia y buenas cosechas.

JEH

Fue la prostituta que introdujo entre los hombres el miedo, la envidia, la lujuria y la codicia así como la responsable de la muerte del primer humano Gayomart.

MAH

Era el antiguo dios de la Luna que regulaba el tiempo y las mareas. Se le asociaba con la vaca, animal muy importante en la antigua mitología persa y tenía dedicado el séptimo día de cada mes.

MASHYANE

Se la considera la madre de la raza humana. Ella y su marido, Mashye, se dejaron influenciar por Ahriman y abandonaron las enseñanzas de Ahura Mazda por lo que fueron castigados al infierno por toda la eternidad

MASHYE

Era el padre de la raza humana y junto a su esposa Mashyane nacieron de una planta andrógina de ruibarbo que había germinado del semen de Gayomart. Mashye y Mashyane abandonaron la doctrina que les había enseñado Ahura Mazda y siguieron a Ahrimán, por lo que fueron condenados a permanecer en el infierno hasta el fin de los días.

MITRA

Era la divinidad persa de la luz y de la verdad. Estaba asociado al fuego y un antiguo culto lo adoraba como dios del Sol. Otorgaba su protección a los fieles y castigaba a los infieles. Fue el dios que mató al toro sagrado cuya sangre, al caer sobre la tierra, dio origen a los animales y plantas. Se le representaba tocado con un gorro frigio y sacrificando a un toro con un largo cuchillo, ritual que muchos autores consideran como el origen de ciertas ceremonias mediterráneas antiguas en las que se sacrificaban toros y como un ancestro de las corridas de toros. También parecía a veces en un carro tirado por caballos blancos.

En los himnos védicos hindúes aparece a menudo relacionado con Veruna, dios supremo hindú, a quien se consideraba como hermano gemelo y algunos autores interpretan que Mitra era el Sol naciente o el cielo durante el día, mientras que Veruna era el Sol poniente o el cielo de noche. En el Avesta persa era una deidad inferior a Ahura Mazda ya que sólo aparecía como un dios, aunque posiblemente en tiempos más primitivos su papel en el panteón fuera más relevante.

MUSH

Era el ratón que devoraba las cosechas. Una de las criaturas que formaba parte del séquito de Ahrimán.

NASU

Era la mosca que se alimentaba de los cadáveres en descomposición y una de las criaturas que formaba parte del séquito de Ahrimán.

ORMUZ

Era el hijo primogénito de Zervan Akarana siendo también conocido como Ahura Mazda o como Spenta Mainyu, el completamente espiritual, y él recibió los dones de su padre. Se trataba de un sabio cuyo conocimiento no poseía límites. Como primera acción, creó seis espíritus a su imagen y semejanza, que rodeaban su trono y le servían como mensajeros para relacionarse con los espíritus inferiores y, más tarde, con los humanos. Tras ellos, formó veintidós espíritus que velarían por la inocencia, la felicidad y conservación del mundo y actuarían como intérpretes de las plegarias de los hombres, constituyendo para todos éstos un modelo de perfección y pureza. En tercer lugar creó un grupo más numeroso de espíritus formados por sus propios pensamientos e ideas concebidas antes del inicio de la creación del mundo material.

A continuación, el dios sabio creó el Universo en forma espiritual y se autoproclamó conservador y juez del mismo.

PAIRIKA

Hada maligna. Una de las criaturas que formaba parte del séquito de Ahrimán.

RASHNU

Era el dios de la justicia y junto con Mitra y Sarrosa juzgaba a las almas tras la muerte pesándolas en su balanza de oro. Era la personificación del comportamiento correcto y cuidaba el puente Chinvat que utilizaban las almas para acceder al cielo.

SPENTA MAINYU

Era el nombre de Ahura Mazda en la primitiva religión persa.

THISYA

Era el dios de la lluvia.

TIRI

Era, junto a Tishtrya, una de las principales deidades astrales y se identificaba con Hermes en la mitología griega.

TISTRYA

Era, junto a Tiri, una de las principales divinidades astrales y se identificaba con la estrella Sirio.

Un mito narraba que cuando la estrella Sirio alcanzaba su cenit en la época de sequía, se entablaba una batalla entre Tistrya y una estrella demoníaca llamada Apausha que estaba cargada con una gran cantidad de lluvia. Tistrya y Apausha adoptaban respectivamente las formas de un potro y de un caballo de formas horribles entrando en combate a orillas del mar Varu-Karta. Inicialmente parecía victorioso Apausha, pero cuando Tistrya era adorado se recuperaba alcanzando la victoria. Tistrya también estaba estrechamente relacionado con la agricultura.

VAYU

Era el dios del viento y se representaba como un guerrero para proteger las cosas creadas por Ahura Mazda.

VERETHRAGNA

También llamado Bahran, era el espíritu de la victoria y el dios herrero que podía adoptar distintas formas: un toro de cuernos dorados, un fuerte viento, un camello, un jabalí, un pájaro, un ciervo luchador, un hombre con espada de hoja dorada, etc. Fue una deidad muy popular entre los sasánidas iraníes, cinco de cuyos reyes llevaron su nombre. Servía también para denominar el día 20 de cada mes.

VOHU MANAH

Personificaba el pensamiento bueno y era el equivalente a Mitra en la India. Tenía asignado el buey como animal consagrado.

XSHATHRA

Era la personificación de la realeza y su elemento era el metal.

YATU

Era el mago, una de las criaturas que formaban parte del séquito de Ahrimán.

YAZATAS

Era el nombre antiguo que daban los persas a la palabra “dios”. Los Yazatas eran las deidades guardianas de lo divino y los mensajeros de Ahura Mazda. Mitra era el principal y Daena, Mah, Rashnu, Tistrya y Zam fueron sus compañeros.

ZAM

Era la representación divinizada de la Tierra. Fue uno de los Yazatas.

ZARICH

Era uno de los miembros femeninos de los Daevas y la personificación de la vejez. Su eterno rival es Ameretat. Los Daevas eran manifestaciones de los malos pensamientos e, incluso, se les consideraba como falsos dioses. En la concepción dualista de Zoroastro, fueron demonizados como contrapunto a las entidades benéficas

ZERVAN AKARANA

Era la deidad primordial en la religión persa y el dios de lo infinito y del espacio. Se trataba de una criatura hermafrodita y, tras mil años de sacrificios, consiguió alumbrar a los gemelos Ahura Mazda y Angra Mainyu. Su primogénito representaba el principio del bien y el segundogénito el del mal por lo que a él se le relacionaba con el principio de neutralidad, es decir, no distinguía el bien del mal. Su nombre significaba tiempo y para la religión oficial de la dinastía sasánida (siglos III al VII d.C.) fue el dios supremo y señor de los cuatro elementos esenciales de la vida: tierra, fuego, aire y agua.