CAPITULO
I LA VERDAD DESNUDA
Un
periódico muy famoso de la ciudad de México D. F., trae a grandes titulares en
la primera página la siguiente noticia: “PLATILLOS VOLADORES EN FRANCIA Y
ESTADOS UNIDOS LOCALIZADOS POR RADAR”.
A
continuación transcribimos el texto de esta alarmante noticia: “Oklahoma City.
Oklahoma, 2 de agosto (AFP). “Los Platillos Voladores reaparecieron anoche en
el medio Oeste de los Estados Unidos”.
“La
policía de carreteras de Oklahoma señala que en la base militar de Tinker,
cerca de Oklahoma City, el radar registró la presencia de cuatro objetos no
identificados que evolucionaron en el cielo a unos siete mil metros de altitud
pero en la propia base rehúsan confirmar o negar la noticia”. (La ocultan).
“Por otra
parte, tres patrullas
de policía afirmaron
haber visto objetos
que en perfecta formación volaron por espacio de
treinta minutos. El color de estos objetos, rojo en un principio, se transformó
paulatinamente en blanco y azul verdoso”.
“La
oficina del Sheriff en Wichita, en Kansas, anuncia, por su parte, que varios
objetos no identificados fueron observados anoche en el espacio de horas, a una
altura que iba de dos mil a tres mil metros”.
ATERRIZÓ
EN UN SEMBRADO
“Marmande,
Francia, 2 de agosto (AFP). Un Platillo Volador fue visto anoche por un estudiante
cerca de la ciudad de Marmande, el sudoeste de Francia. Según el testigo, se
trataba de un enorme disco luminoso que se posó en un sembrado y que luego se
elevó para alejarse a una velocidad vertiginosa”.
De
todos los rincones de la tierra llegan alarmantes noticias sobre platillos
voladores. En Francia una de esas naves cósmicas aterrizó y de su interior
salieron los tripulantes de mediana estatura, según un testigo ocular. Las
autoridades hallaron en el lugar huellas de una nave desconocida.
En
Argentina otra nave aterrizó sobre una montaña de difícil acceso. Un campesino
dió parte a las autoridades. Éstas pudieron contemplar la nave, pero no
lograron llegar hasta ella debido a lo accidentado del terreno.
Sobre
una torre de control de cohetes cósmicos en Australia voló una nave cósmica en
instantes en que los expertos de dicha torre seguían la trayectoria del cohete
que fotografió a Marte.
La
verdad desnuda en cuestión de Platillos Voladores es que realmente existen y
que han sido registrados por radar y debidamente fotografiados. Resulta
imposible que el radar y los aparatos de fotografías puedan sufrir
alucinaciones.
Esta
cuestión de los Platillos Voladores está ya escandalosa y aunque los bribones y
los escépticos, hagan mofa y escarnio de aquellos que afirmamos la existencia
de las Naves Cósmicas, gústeles o no, los Platillos Voladores son un hecho
concreto, debidamente registrados por radar.
Estamos
absolutamente seguros de que a los bribones no les gusta este espinoso asunto,
debido a eso que se llama amor propio. A nadie le gusta que le hieran el amor
propio. Ellos se quieren demasiado a sí mismos y no están dispuestos a
renunciar a sus queridas teorías así porque si.
Los
bribones creen que sólo en la Tierra existen seres humanos. Es mucha su
presunción al creer firmemente que sólo ellos tienen derecho a vivir en un
Cosmos tan maravilloso e infinito. Empero, ellos son así y no hay forma de
convencerlos de que están equivocados.
Ante
los hechos concretos, ante las noticias sensacionales sobre Platillos
Voladores, el MOVIMIENTO GNÓSTICO se pone en pie para exigir a los hombres de
ciencia, que hablen con más franqueza y que no sigan con el propósito de
ocultar la verdad sobre los Platillos Voladores o Naves Cósmicas.
En
el desierto de Nevada, Estados Unidos, el gran científico norteamericano
Adamski se puso en contacto con unos Venusinos que aterrizaron cerca al puesto
donde él estaba haciendo sus investigaciones. Este científico de reconocido
prestigio mundial pudo platicar ampliamente con dichos Venusinos.
En
un país suramericano cuyo nombre no podemos mencionar, existe una sociedad
científica compuesta por noventa y ocho sabios discípulos de Marconi. Estos
sabios conviven con un grupo de Marcianos que normalmente aterrizan en dicha
región.
Lo
que más le molesta a los bribones, es que la cosa no se haga pública y que todo
se haga tan en secreto. Nosotros les preguntamos a estos bribones si ellos son
así tan inconscientes, como para regalarle una bomba de dinamita a un niño de
tres años. ¿Que le sucedería a un niño que jugara con una bomba de dinamita?
Si
a la humanidad se le regalaran los Platillos Voladores, podemos estar
absolutamente seguros de que dichos Platillos serían utilizados para la guerra
y entonces nadie sobre la faz de la tierra, podría estar seguro de su propia
vida. Recordemos la velocidad que desarrollan estas Naves, el poder de elevarse
o descender verticalmente, el poder de permanecer aparentemente quietas en el
aire, etc., etc.
Regalarle
estas naves a la humanidad, seria como regalarle una bomba de dinamita a un
niño para que jugara con ella. A los señores bribones que tanto les disgusta el
secreto, les aconsejamos tres cosas: Primera, Regenerarse. Segunda, una buena
dosis de paciencia. Tercera, abandonar el concepto equivocado de considerarse
los únicos habitantes del Cosmos.
El
cohete que fotografió a Marte no es una maravilla de la ciencia. Las pésimas
fotografías sacadas a diecisiete mil kilómetros de distancia es imposible que
puedan informar que existe o no vida en Marte. Resulta estúpido deducir de una
pésima fotografía la realidad vital sobre el Planeta Marte. Los innumerables
cráteres de Marte, no significan que éste sea un mundo muerto como la Luna.
Si
se fotografiara a la Tierra a una distancia de diecisiete mil kilómetros, es
lógico que la fotografía sería similar a las que se obtuvieron sobre Marte.
Entonces veríamos en dichas fotografías, algo brumoso, lleno de innumerables
cráteres. Ninguna fotografía de tipo Cósmico puede informarnos el oxígeno que
haya o no haya en determinado planeta.
Aún
cuando los señores bribones se sientan muy molestos y lancen contra nosotros
toda su baba difamatoria, la realidad es que en distintos lugares de la Tierra,
ya existen grupos selectos de personas que están en directo contacto con los
habitantes de Marte, Mercurio, Venus, etc.
CAPITULO
II UN VISITANTE JUPITERIANO
Las noticias
que vienen de
todas partes del
mundo aseguran que
las Naves Cósmicas aterrizan en distintos lugares de la
Tierra. Lo que más le molesta a los bribones es no poder capturar una de esas
Naves con tripulación y todo.
Estamos
absolutamente seguros de que los caníbales del África y del Amazonas también se
sienten muy molestos cuando no logran capturar a un explorador.
En
el caso concreto de los Platillos Voladores las gentes quieren proceder como
caníbales, pero los tripulantes de las Naves Cósmicas conocedores del
salvajismo humano es claro que no están dispuestos a dejarse atrapar porque
saben muy bien la suerte que les aguarda. Los bribones los harían presos, las
Naves serían decomisadas y utilizadas para la guerra, etc., etc., etc.
Las
tripulaciones de esas Naves Cósmicas no están dispuestas a servir de conejillos
de Indias y antes que dejarse atrapar prefieren con justa razón desaparecer en
el espacio infinito, esto es semejante, al explorador de raza blanca que huye
ante la tribu de caníbales.
Estamos
diciendo algo que pueda herir demasiado a los bribones porque ellos se quieren
demasiado a si mismos y presumen de super-civilizados aunque en el fondo sean
verdaderamente salvajes vestidos a la moderna.
En
el Brasil, cerca de Paraná, aterrizó una Nave Cósmica en presencia de un
científico famoso, de apellido Kraspedón. El capitán de dicha Nave invitó al
mencionado científico a visitar su Nave.
El
citado científico pudo conocer no sólo el interior de la Nave, sino también su
tripulación.
El
capitán de dicha Nave dijo venir de un Satélite del Planeta Júpiter. Habló en
perfecto español y prometió al citado científico corresponder a su visita.
Cuando el señor Kraspedón quiso darle al capitán sus datos domiciliarios no fue
necesario porque el capitán declinó la oferta diciendo: “Nosotros sabemos
perfectamente cómo encontrarlo a usted en la Tierra”.
Seis
meses más tarde, un domingo cualquiera, el señor Kraspedón encerrado en su
estudio en su casa, fue interrumpido de pronto por su mujer quien le informó
que en la puerta estaba un hombre que deseaba hablar con él. Díjole que tal
hombre traía entre sus manos una Biblia y que insistió en dar explicaciones
sobre ésta.
El
señor Kraspedón ordenó a su mujer despedir al visitante y cerrar la puerta.
Momentos después regresó la señora informando a su marido que el mencionado
visitante no quería irse e insistía en hablar con él.
Un
poco mal encarado resolvió el citado científico abandonar su estudio y salir a
la puerta para atender al visitante. Grande fue su sorpresa al encontrarse cara
a cara con el capitán de la Nave Cósmica que seis meses antes había conocido.
El
señor Kraspedón invitó al visitante, haciéndolo pasar a la sala de su casa.
Luego vino la plática. El citado científico quiso examinar las capacidades
intelectuales del Jupiteriano y lo metió en un callejón muy difícil, con
preguntas complicadísimas sobre la Biblia,
Aquel
visitante demostró poseer una brillantísima inteligencia pues conocía hasta las
raíces más íntimas del griego, del hebreo y del arameo y supo darle a las
Sagradas Escrituras interpretaciones altamente científicas, profundamente
filosóficas, extraordinariamente artísticas y trascendentalmente místicas.
Después
de esa entrevista, hubo dos entrevistas más en distintos lugares de la ciudad a
las cuales concurrió el citado científico acompañado por un Profesor de Física
y Matemáticas.
Las enseñanzas
que dió el
Jupiteriano en materia
de Astronomía fueron
realmente formidables, todo ese conocimiento es trascendental.
El
señor Kraspedón es un científico serio; no se trata de ningún charlatán.
Resolvió condensar todos los conocimientos que el Jupiteriano le entregó en un
precioso libro escrito en portugués y titulado los “DISCOS VOLADORES”.
Advirtió
el Jupiteriano que las explosiones atómicas están alterando la camada superior
de la atmósfera terrestre. Esta camada es el filtro supremo que descompone y
analiza los rayos solares transformándolos en luz y calor.
Dijo
el Jupiteriano que si los científicos atómicos continuaban con sus explosiones
nucleares llegaría el día en que ya el filtro supremo seria incapaz de analizar
y descomponer los rayos solares en luz y calor, entonces veríamos al Sol negro
como silicio y la Luna roja como sangre y sobre la faz de la Tierra un color
rojo ferruginoso.
Advirtió
el Jupiteriano que al descomponerse la Camada Superior de la Atmósfera
terrestre que sirve de sustentáculo para la vida de la Tierra, vendrían grandes
terremotos y las ciudades caerían como castillos de naipes, hechas polvo.
Informó
el Jupiteriano diciendo que ya ellos, los navegantes del espacio que visitan a
la Tierra, están viendo la Camada Superior de la Atmósfera terrestre en franco
proceso de alteración y sin el brillo y esplendor de otros tiempos. Dijo el
Jupiteriano que la guerra termo-nuclear saturará con las radiaciones atómicas
el agua que bebemos, los cultivos con que nos sostenemos, las nubes que traen
las lluvias, etc.
Advirtió
el Jupiteriano que la radiación atómica dañará el fósforo en el cerebro del ser
humano y por doquiera se verán escenas dantescas en las calles, hospitales
llenos de gentes, multiplicación del cáncer y de la leucemia, millones y
millones de muertos, hambre y desesperación. Los tiempos van pasando, las
explosiones atómicas continúan ahora en forma subterránea tanto en Rusia como
en los EE.UU.. Francia y China siguen haciendo explosiones atómicas en la
atmósfera y los diarios del mundo entero traen noticias de terremotos espontáneos
ya en Chile, ya en San Salvador, ahora en Irak, Japón, etc.
Estamos
ante hechos concretos que no se pueden refutar. A los envidiosos les molestará
mucho el citado relato sobre el Jupiteriano y el señor Kraspedón y no nos
extrañaría mucho que ahora lancen contra nosotros todas sus sátiras basadas en
un escepticismo estúpido como aquellos que se burlaron de Pasteur, Galileo,
Edison, etc.
Lo
que más les molesta a los envidiosos es
no tener la oportunidad que tuvo el señor Kraspedón, estamos seguros de
que los caníbales y que si a estos envidiosos se les diera semejante
oportunidad abusarían de ella inevitablemente, capturando o matando a los
visitantes del Cosmos Infinito. Los caníbales son caníbales y los habitantes de
otros mundos saben muy bien cuidarse de ellos desapareciendo en el espacio
antes que las hordas bárbaras puedan capturarlos.
CAPITULO
III EL HOMBRE QUE FUE A VENUS
Nosotros
conocernos personalmente a SALVADOR VILLANUEVA MEDINA el hombre que fue a
Venus. Salvador no tiene nada de fantástico ni de desequilibrado. Salvador ha
sido examinado por los psiquiatras y ellos han llegado a la conclusión de que
éste es un hombre normal, mentalmente equilibrado
Salvador
no vive de su extraordinaria aventura ni tampoco del libro que escribió
titulado “YO ESTUVE EN EL PLANETA VENUS”. Este caballero ahora es mecánico de
profesión, arregla automóviles, de eso vive, nosotros mismos hemos estado en su
taller viéndolo trabajar, es práctico ciento por ciento. El domicilio de este
caballero lo reservamos por no tener autorización para darlo en un impreso.
Nosotros
sólo nos limitamos a dos cosas: Primera, dar testimonio de que este es un
hombre absolutamente cuerdo dedicado a su trabajo y a su familia. Segunda, que
este hombre pasó por una aventura formidable pero que no vive en ella.
Salvador
Villanueva Medina cuenta lo que pasó y esto le ha costado muchos sufrimientos
porque los bribones, los escépticos de siempre, los imbéciles han hecho
escarnio de él.
Salvador
estuvo en Venus fuera de toda duda y cumple con el deber de informar a sus
semejantes aunque éstos se burlen de él. El que ríe de lo que desconoce está en
el camino de ser idiota.
En
la segunda decena del mes de agosto de 1953 Salvador conduciendo un automóvil
rumbo a Laredo en el que llevaba unos “gringos” que deseaban regresar a su país
tuvo que pasar por las peripecias más tremendas.
El
carro se dañó, sus acompañantes decidieron regresar a un pueblo cercano en
busca de una grúa. Entre tanto en el silencio de la noche Salvador se metió
debajo del coche con el propósito de arreglarlo.
Cuando intentó
salir de debajo
del automóvil oyó
que alguien se
acercaba, pues se escuchaban pasos en la carretera. Una voz
extraña le preguntó en perfecto español, ¿qué le pasa al coche? Salvador no
contestó. Se encontró frente al hombre extrañamente vestido, de pequeña
estatura un metro con veinte centímetros aproximadamente.
El
extraño uniforme del visitante, el rostro tan blanco como el marfil, el pelo
largo platinado y ondulado cayendo sobre sus hombros, la perfección de su
rostro, etc., sorprendieron tremendamente a Salvador.
Cuenta
Salvador que este extraño visitante llevaba un cinturón con perforaciones de
las cuales salían extrañas luces.
Salvador
sólo se limitó a preguntarle al misterioso personaje si era aviador. El
personaje contestó que su avión, como nosotros lo llamamos, estaba a poca
distancia. Dichas estas palabras el personaje se metió entre la montaña. Cuenta
Salvador que después de este suceso resolvió dormir tranquilamente entre su
carro.
No
había pasado mucho tiempo cuando fue despertado por fuertes golpes dados en el
vidrio de la puerta delantera del lado derecho. Salvador abrió su puerta y fue
grande su sorpresa al encontrar al conocido que venía ahora en compañía de otro
individuo semejante. Salvador los hizo entrar en su carro y platicó con ellos
ampliamente.
Aquellos
personajes dijeron venir de Venus y dieron muchos datos sobre este planeta.
Dijeron
que en Venus las calles se prolongaban sin fin llenas todas de pasos a desnivel
para evitar accidentes.
En
Venus los vehículos no consumen combustibles ni vegetales ni minerales, pues
son perjudiciales para los
organismos. Los venusinos
utilizan la energía
solar para propulsar
sus vehículos.
Le
dijeron que las banquetas, andenes o aceras de las calles no están quietas pues
están organizadas en forma de bandas metálicas que se mueven y ahorran
esfuerzos a los transeúntes y que la gente jamás ocupa el arroyo de la calle
pues éste es metálico y conductor de la fuerza solar con que se impulsan todos
los vehículos.
Dijeron
los venusinos que ellos en su mundo tenían un sólo mar pero que era éste, tres
veces más profundo que los nuestros.
Salvador aseveró
que según nuestros sabios
terrestres ningún otro planeta
puede tener habitantes
racionales.
Los
venusinos contestaron: ¿qué les hace pensar tal cosa? ¿acaso los deficientes
medios de que disponen para hacer sus cálculos? ¿no les parece demasiada
pretensión creer que son los únicos seres que pueblan el Universo?
Aquellos
venusinos informaron ampliamente a Salvador sobre la vida de Venus. Disiparon
sus dudas explicándole que ellos se habían criado en Venus mediante sistemas
científicos especiales, un clima artificial uniforme o benigno convirtiendo así
su mundo en una morada deliciosa.
Explicaron
que en Venus los niños no vagan por las calles, que el Gobierno los controla
hasta que alcanzan la edad
adecuada, que se les
clasifica de acuerdo
con sus cualidades
físicas y mentales y se les
asigna determinado lugar donde hacen falta.
Explicaron
estos venusinos que del mar sacan todos los elementos necesarios para construir
edificios, confeccionar ropa, fabricar vehículos y un sesenta o más del
porcentaje de su alimentación.
Dijeron
que sus barcos lo mismo pueden estar en el aire que en el agua y que en el
fondo del mar existen gigantescas fábricas encargadas de seleccionar y
aprovechar científicamente el pescado para su alimentación.
Afirmaron los
venusinos que aquí en nuestro
planeta tierra se
quedan algunos de
ellos vestidos de paisano con el propósito de estudiar a la humanidad de
nuestro planeta. Dicen ellos que la etapa histórica por la que nosotros los
terrícolas estamos atravesando ahora, la vivieron ellos hace muchos miles de
años.
Ellos
también conocieron las guerras, los líderes astutos de la política hasta que al
fin nació la fraternidad. Hoy en
día no tienen banderas. Han hecho
de su mundo una
sola Patria y están gobernados por sabios que solo se
limitan a aconsejarlos con sabiduría y amor.
Salvador
fue invitado por los venusinos a comprobar la realidad de esas afirmaciones.
Salió del coche tras los dos hombres. Se metió con ellos entre la montaña y
encontró una majestuosa nave en figura de esfera achatada que se apoyaba en
tres boyas que formaban triángulo.
Dice
Salvador que dicha nave tenía en la parte superior, un cable ligeramente
inclinado hacia dentro, como de un metro de altura, circundado de agujeros que
semejaban ojos de buey como los que se usan en los barcos.
Salvador
penetró tras de sus acompañantes en el interior de la formidable nave cósmica
que según palabras de Salvador parecía una impresionante fortaleza.
Cinco
días estuvo viviendo Salvador en el Planeta Venus y regresó a la Tierra después
de haber verificado la realidad de todas estas afirmaciones hechas por los
venusinos.
La
civilización venusina es millones de veces más avanzada que la de nosotros los
orgullosos terrícolas.
Salvador
relata lo que vio, nosotros nos limitamos a comentarlo. La Casa Phillips
examinó muestras de tierra y de plantas recogidas en el lugar donde Salvador
encontró la nave y se descubrió un desorden atómico muy extraño de esas muestras.
También
se fotografió el lugar pues allí quedaron las huellas de la nave. El sabio
Adamski dictó una conferencia sobre este tema en el Teatro “Insurgentes” de
México. Una comisión alemana de científicos se interesó por la cuestión y
visitó a Salvador y estudió en el terreno de los acontecimientos.
No
ha quedado duda alguna, empero, los imbéciles se seguirán riendo como siempre
porque son imbéciles.
CAPITULO IV PLATILLOS VOLADORES Y HOMBRECILLOS VERDES
De
Lima, Perú, vino una noticia fechada el dos de agosto cuyo texto es el
siguiente: “Un Platillo Volador con su tripulación, un enano de color verdoso,
fue visto anoche en la azotea de una casa de esta capital, por un joven
estudiante, según declaración que prestó hoy al diario “EL COMERCIO”.
“Esta
visita se agrega a una que dio cuenta la semana pasada un guardián del Distrito
Chosica, a cuarenta kilómetros de Lima, quien informó haber visto en el patio
de una fábrica un Platillo provisto de una trompa como de elefante, que
desapareció a los diez minutos de observación”.
“En
cuanto al Platillo Volador de anoche, Alberto San Román Núñez, de quince años,
afirmó haber visto un ser verdoso, arrugado, de noventa centímetros de alto que
se deslizaba por la azotea”.
“Poco
después, la Nave arrojó una luz rojiza en medio de la cual levantó vuelo,
dejando en el piso sus huellas en las que se aprecian cuatro bases de
asentamiento”.
Hasta
aquí esta maravillosa noticia. La piel de color verde puede sorprender a muchas
gentes, pero nosotros los terrícolas tenemos también razas de color negro y
amarillo y piel roja que podrían sorprender a los visitantes cósmicos.
Realmente
ninguno de los testigos presenciales de Platillos Voladores y tripulantes
extraterrestres podrían atreverse
a asegurar que
estos visitantes misteriosos
tengan formas diferentes a los de
nosotros pobres terrícolas.
Es
lamentable que la ciencia ficción se haya dedicado a propagar ideas falsas o
fantasías sobre la figura y forma de los visitantes extra-terrestres. Es claro
que el color de la piel varia según los climas, según los ambientes, etc., pero
la forma humana ya sea gigantesca, mediana o pequeña, es siempre la misma.
La
ciencia ficción se ha encargado de propagar por doquiera ya a través de la
radio, ya a través del cine o de la televisión tremendas falsedades
perjudiciales para la humanidad.
Se
han levantado calumnias infamantes contra los visitantes extra-terrestres, la
mente de los terrícolas juzga de acuerdo con sus perversidades y quiere ver en
nuestros nobles visitantes todo el odio de la mente terrícola, todas las
atrocidades de un HitIer, todas las monstruosidades del inventor de la Bomba
H., todas las purgas sangrientas de un Stalin, etc., etc., etc.
No
quieren darse cuenta estos perversos terrícolas del noble propósito de nuestros
amigos extra-terrestres, si ellos quisieran tomarse el planeta Tierra y
esclavizar a todos sus habitantes lo harían en minutos porque tienen elementos
suficientes para hacerlo.
Si
ellos quisieran destruirnos ya lo hubieran hecho porque tienen instrumentos
atómicos y científicos con los cuales pueden hacer saltar en pedazos cualquier
planeta del espacio. Recordemos que mucho antes que nosotros los terrícolas
conociéramos las Matemáticas, ya ellos navegaban en el espacio sideral.
Nuestros
amigos extraterrestres conocen el Planeta Tierra mejor que nosotros y no tienen
ningún interés en esclavizarnos o destruirnos como lo ha propagado
misteriosamente la ciencia ficción de estos tiempos del Rock y Rebeldes sin
causa.
Nuestros amigos
extra-terrestres conocen la
hora crítica que
vivimos y sólo
quieren ayudarnos. Necesitamos con suma urgencia su ayuda porque
nosotros los terrícolas estamos totalmente fracasados. Si las hordas bárbaras
continúan en su estúpido propósito de capturar o destruir las naves cósmicas
que nos visitan, perderemos lamentablemente la brillante oportunidad que
nuestros hermanos del espacio nos están brindando.
Ellos
quieren establecer contacto personal con nosotros, pero en vez de recibirlos
con verdadero respeto y amor, en vez de brindárseles hospitalidad, se les envía
aviones de caza para interceptarlos.
Todo el mundo
quisiera destruirlos, realmente
nos estamos comportando
como salvajes ajenos a toda civilización y a toda cultura.
Ha llegado
la hora de
cambiar nuestra actitud
belicosa y ofrecer
a nuestros hermanos visitantes del espacio, nuestra
amistad y nuestro cariño. Ellos vienen a ayudamos no a destruirnos.
Los
hermanos gnósticos deben empezar por dar el ejemplo estableciendo en las
azoteas de nuestras casas, en nuestro país, en nuestros terrenos, señales
amistosas, círculos con puntos en el centro. Del punto salen líneas que se
dirigen a la periferia y de la periferia salen pequeñas líneas que aunque no
llegan hasta el centro dan a entender que se dirigen hacia el centro, hacia el
punto.
Hacer
que el punto citado en el centro del circulo, tenga un bello color dorado para
simbolizar a la Divinidad.
Las
líneas que de la periferia se dirigen hacia el centro, hacia el punto, pueden
ser azules en bastante cantidad y cortas.
Las líneas que
del centro se dirigen hacia el círculo es claro que
conectan al punto con la circunferencia y pueden ser también de color azul.
Este
es el símbolo de la Divinidad en la Religión
Marciana. Nosotros podernos usarlo
poniéndolo sobre nuestras casas,
en nuestros terrenos, haciéndolo con focos luminosos o simplemente pintado,
para establecer relación amistosa
con los
habitantes de Marte y con todos los habitantes del Cosmos.
Dicho
símbolo significa que todo sale de la Divinidad y regresa a la Divinidad.
Usar
este símbolo para brindar amistad a los habitantes del espacio, aunque los
bribones se rían de nosotros. Ya todos vosotros sabéis lo que son los bribones,
ellos son escépticos ciento por ciento, presumen de súper civilizados, se creen
muy sabios y usan la sátira y la fina ironía contra todos los que no queremos
pensar como ellos.
CAPITULO V EL MOVIMIENTO GNÓSTICO
El
hombre se ha lanzado a la conquista del espacio sin importarle un comino los
Platillos
Voladores
ni la cuestión Espiritual.
Rusos
y gringos quieren conquistar la Luna y es claro que ALUNIZARAN, aunque los
cohetes cósmicos resultan algo grotesco y hasta ridículo si los comparamos con
los Platillos Voladores. Lo más lamentable de todo esto, es el instinto
agresivo de la humanidad terrestre. Quien se tome la Luna va a querer
convertirla en una plataforma militar armada con potencial atómico.
Todavía
no se han tomado la Luna tirios y troyanos y ya se habla de cohetes atómicos
orbitales para destruir ciudades indefensas. Ese es el estado en que
desgraciadamente se encuentra la humanidad terrestre.
El
inventor de la Bomba H todavía no sabe el daño que le causó a la humanidad. Si
una de esas bombas de Hidrógeno llegase a explotar en las zonas superiores de
la atmósfera donde existe el depósito de Hidrógeno puro, se quemaría toda la
atmósfera de la Tierra, cumpliéndose así la profecía dicha por Pedro en su
segunda Epístola que a la letra dice así: “Pero el día del Señor vendrá como
ladrón en la noche; en el cual los Cielos pasarán con grande estruendo, y los
elementos ardiendo serán desechos, y la tierra y las obras que en ella hay
serán quemadas”. (Ver 10. Epístola 2. San Pedro).
Es
claro que antes de que esto sucediese, antes que a un loco se le ocurriese
hacer este experimento con la bomba de hidrógeno, antes de que ella llegase a
explotar en las zonas superiores de
la atmósfera, donde
está el hidrógeno
puro de la
Tierra, el depósito
viviente de hidrógeno universal, podemos estar seguros de
que ellos, los navegantes del espacio infinito, harían volar en pedazos el
planeta Tierra, porque las humanidades de los otros planetas del sistema solar,
no tienen qué sufrir las consecuencias de la explosión del hidrógeno terrestre.
Semejante catástrofe
terrestre repercutirá espantosamente sobre
los otros Planetas
del sistema Solar y antes que ésta sucediese, ellos, los navegantes del
espacio sideral, se verían obligados con dolor profundo a destruir este
Planeta, haciéndolo volar en pedazos, porque no es justo que otras humanidades
planetarias sufran las consecuencias de las locuras del hombre terrestre.
En
estos instantes los habitantes de la Tierra están llenos de orgullo y soberbia.
Los perversos han levantado la Torre de Babel con la cual piensan conquistar el
espacio exterior y ya los habitantes de los otros mundos del sistema Solar,
tienen orden de defenderse. Los cohetes espaciales llegarán a la Luna
inevitablemente. Después querrán estos terrícolas perversos y ensoberbecidos
lanzarse sobre Marte. El encuentro con las humanidades de otros Planetas es por
lógica deducción, totalmente inevitable y a esta raza caduca y degenerada no le
quedará más remedio que transformarse o perecer.
EL
MOVIMIENTO GNÓSTICO CRISTIANO UNIVERSAL quiere forjar grupos de hombres y
mujeres de buena voluntad para dar la bienvenida a nuestros hermanos del
espacio.
Millones
de seres humanos llenos de soberbia, orgullo y perversidad, sólo creen en sus
cohetes espaciales y en sus armas destructivas. Esas hordas de sabihondos están
entregados a todos los vicios de la Tierra y se ríen a sus anchas de todo lo
que huele a Platillos Voladores.
EL
PUEBLO GNÓSTICO de ninguna manera acepta al Anti Cristo de la falsa ciencia ni
menos puede creer que se pueda conquistar el espacio infinito sin habernos conquistado
a sí mismos. SeríA absurdo suponer que las hordas bárbaras de la Tierra puedan
conquistar a otros mundos y esclavizar a humanidades planetarias superiores.
EL
PUEBLO GNÓSTICO no acepta la perversidad de los bribones y ha resuelto
organizar el EJERCITO DE SALVACIÓN MUNDIAL con hombres y mujeres de buena
voluntad que estén dispuestos con alegría a dar la bienvenida a nuestros
hermanos del espacio sideral.
El
Movimiento Gnóstico Universal establecerá por doquiera, en los distintos
lugares de la Tierra, verdaderos cenáculos místicos, conducentes al estudio de
las leyes cósmicas, con el propósito de preparar a las gentes para recibir a
nuestros hermanos del espacio. El Movimiento Gnóstico comprende la necesidad de
las Naves Cósmicas para viajar a través del infinito, pero no cree que el
camino de la perversidad, el orgullo y la cohetería sea precisamente el
indicado.
El
Cosmos infinito es sagrado y está gobernado por leyes divinas que no se pueden
impunemente quebrantar sin recibir las desastrosas consecuencias. Nosotros los
Gnósticos estamos dispuestos a estudiar las leyes del espacio eterno con toda
humildad y a los pies de nuestros hermanos del espacio. Sabemos que ese es
precisamente el camino exacto que puede permitirnos navegar en las verdaderas
Naves Cósmicas, por todo el espacio infinito.
Ahora
necesitamos prepararnos acabando con todos nuestros defectos, disolviendo ese
YO que llevamos dentro, ese Mefistófeles perjudicial. Ya que en algunos lugares
de la Tierra, muy secretamente, existen grupos humanos selectos que están en
contacto con los visitantes cósmicos, de los cuales han recibido pequeñas
cantidades de Naves Interplanetarias.
En
los Himalayas llenos de nieve y frío, existe cierto grupo de Lamas que está en
contacto con nuestros hermanos del espacio. Ese grupo posee muy en secreto
cierta cantidad de Platillos Voladores, con los cuales viaja a través del
infinito. En otros lugares de la Tierra existen grupos similares que ya poseen
los Platillos Voladores. Estamos diciendo algo que ni remotamente pueden
aceptar los bribones sabihondos, irónicos, sarcásticos y llenos de petulancia.
Empero, qué importa a la ciencia y qué a nosotros?
Vamos,
los hermanos del Movimiento Gnóstico a prepararnos humildemente para hacernos
dignos y merecedores de recibir en grupos selectos y ocultos a los hermanos del
espacio. El 27 de diciembre de 1968 habrá de realizarse en Barranquilla,
Colombia, Sur América, nuestro Segundo Congreso Gnóstico. Este evento será
Internacional debiendo concurrir las delegaciones de todos los SANTUARIOS
GNÓSTICOS de América. Entre otras cosas el Congreso Gnóstico debe estudiar a
fondo métodos y sistemas de acción conducentes a propagar por doquiera estas
ideas, con el propósito de formar ambiente para nuestros hermanos del espacio.
Es
necesario, es urgente propagar estas
enseñanzas y formar verdaderos
hogares para nuestros hermanos
del espacio. Invitamos a los hermanos de todas las Religiones, Escuelas y
sectas a este gran congreso Ecuménico Internacional, espiritual sin distingos
de credos, raza, sociedad, escuela, orden, sexos, color.
PAZ
INVERENCIAL. SAMAEL AUN WEOR
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