Terminado el viaje del sistema solar
alrededor del zodíaco, llegó a su final en la época lemúrica.
La Lemuria fue un continente que
estuvo ubicado en el Océano Pacífico, que tuvo una raza maravillosa. ¿Duró
cuanto tiempo? Duró le que dura un viaje del sistema solar alrededor del
zodíaco. Concluyó el viaje, y al concluir, llegó Hercólubus (que hace juego con
ese viaje, un juego mecánico extraordinario). Entonces, con su fuerza tan
potente atrajo el fuego del interior de la Tierra, brotaron volcanes por todas
partes. En la Lemuria, se provocaron grandes terremotos y durante unos diez mil
años de incesantes terremotos y maremotos, se fue hundiendo entre el Pacífico,
la Lemuria.
Un nuevo viaje del sistema solar
alrededor del zodíaco, sirvió de basamento para la Raza Atlante. ¿Cuánto tiempo
duró la Raza Atlante? Tanto tiempo cuanto duró el viaje del sistema solar
alrededor del zodíaco. Concluido ese viaje, llegó Hercólubus que produjo una
revolución de los ejes de la Tierra (los mares cambiaron de lecho y se acabó la
Atlántida).
Ahora, en estos precisos momentos,
está finalizando el viaje también (el viaje del sistema Solar alrededor del
Zodíaco). Este viaje se inició a raíz del hundimiento de la Atlántida en la
Constelación de Acuario (del aguador), teniendo frente a la Constelación de Leo
(del león); entonces se inició el nuevo viaje del sistema solar alrededor del
zodíaco... Entonces, ¿qué sucederá? Vendrá el hundimiento de la Raza Aria, ese
es el caso de nosotros. A raíz del
diluvio universal, comenzó el nuevo viaje del sistema solar alrededor del
Zodíaco, entonces se inició la Raza Aria. En estos momentos el viaje ha
terminado, ha llegado a su final, estamos otra vez en Acuario, el viaje se
empezó en Acuario y terminará en Acuario, y la raza nuestra, durará hasta
finalizar el viaje, no puede durar un poco más ni un poco menos, sino hasta
finalizar el viaje; de manera que el viaje está exactamente para concluir. En
este momento tenemos a Acuario y frente a Acuario está la Constelación de Leo,
el león. ¿Qué sucederá ahora? Conforme este planeta Hercólubus se vaya
acercando, los fuegos que hay en el interior de la tierra, brotarán a la
superficie atraídos por la masa magnética de Hercólubus, entonces aparecerán
volcanes y terremotos por todas partes, y está raza perecerá por el fuego y los
terremotos; entre el fuego y los terremotos "harán su agosto".
En el máximum de acercamiento de
Hercólubus a la tierra, producirá exactamente una revolución de los ejes de la
tierra, entonces los mares cambiarán de lecho y se tragarán a los actuales
continentes, luego vendrá un duelo a muerte entre el fuego y el agua, y durará
varios siglos. En tanto la raza escogida (los selectos) tendrá que vivir en esa
isla en el Pacífico, hasta que aparezca un doble arco iris en las nubes; cuando
eso suceda, esta raza escogida, éste núcleo escogido pasará a vivir en los
cielos y tierras nuevas que habrán surgido del fondo de los mares; entonces
vendrá la Edad de Oro.
Ahora bien, en cuanto a estaciones,
saben ustedes muy bien que hay cuatro estaciones: Primavera, Verano, Otoño e
Invierno.
Nuestra tierra viaja alrededor del
sol y tiene cuatro estaciones. En este momento nos encontramos exactamente en
la primavera, vendrá luego el verano, el otoño y el invierno. Pero también
sucede que en el viaje del sistema solar alrededor del cinturón zodiacal, es
decir, en el gran año sideral (el gran ciclo solar, sideral) hay cuatro
estaciones, Primavera: La Edad de Oro; Verano: Edad de Plata; Otoño: La Edad de
Cobre; e Invierno: La Edad de Hierro.
Primavera: no hay fronteras ni
aduanas, ni policías, ni ejércitos, ni guerras de ninguna especie. Todos adoran
al Sol, se le rinde culto al astro Rey, reina el amor, la fraternidad, la gente
no tiene Ego, ha salido limpia de entre las manos de su creador.
Edad de plata: ligeramente pierde su
esplendor la belleza de la humanidad, pero sin embargo continua esplendente.
Edad de Cobre: comienzan las
primeras guerras, comienzan las aduanas, las fronteras a existir; los reyes,
los imperios.
Edad de Hierro: es en la que estamos
actualmente. Cuando una raza llega a la Edad de Hierro, se vuelve así como
estamos actualmente, terriblemente perversa; entonces es destruida, ya por el
fuego, o por el agua, o por ambos.
Si examinamos actualmente nosotros
el Zodíaco, vemos que estamos en la Constelación de Acuario, frente a frente
está Leo, el signo de Leo, el signo del fuego. ¿Qué quiere decir esto? Esta
claro, a la vista, el duelo a muerte que va a haber en este siglo entre el agua
y el fuego, el fuego y el agua.
Si miramos nosotros a Acuario, está
gobernado por Urano y Saturno. Urano es un planeta catastrófico,
revolucionario, terrible en gran manera, y en cuanto a Saturno está
representado en alquimia por el Cuervo Negro de la muerte (el regreso al caos
original primitivo).
Y si miramos frente a frente a Leo
que está frente a nosotros en este momento, es el signo del fuego, el León de
la Ley que sale al encuentro de esta humanidad perversa (con el fuego). De
manera que los dos signos en este momento (el agua y el fuego) frente a frente;
eso es terrible, es la destrucción de esta raza totalmente. No hay tal de que después del año dos mil,
que ha de venir una era de fraternidad, como esperan los acuarianistas; no (que
todo será amor, de que las fronteras desaparecerán, todo de por sí sólo
desaparece, como si pudiera el Ego crear una Edad de Oro).
¿Creen ustedes de que el Ego va a
poder crear una Edad de Oro? Mientras existan los factores de la discordia
dentro de uno, tienen que haber guerras en el mundo; mientras existan los
factores del egoísmo y de la ambición, de lujuria y de orgullo, tiene que haber
guerras. ¿De donde va a sacar el Ego una Edad de Oro? Eso es absurdo. Para que
pueda haber una Edad de Oro, se necesita la destrucción de esta humanidad, el
caos; que surja de entre el caos, tierras nuevas, para ser habitadas por una
humanidad inocente, una humanidad desprovista de Ego.
En la Edad de Oro no se le va a dar cuerpo
a nadie que tenga Ego. Cualquier persona con Ego será echada atrás, porque por
una sola que tome cuerpo y teniendo el Ego adentro, esa sola acaba con la Edad
de Oro, corrompe a todos los demás. Lógico, la Edad de Oro es la edad de la
inocencia, de la belleza y del bien, del amor, de la fraternidad, de la
hermandad entre los pueblos.
P.- Venerable Maestro, siendo esta
humanidad inocente y pura, ¿también tendrá su Edad de Plata, de Cobre, de
Hierro?
R.- ¡Claro!
P.- ¿Quiere decir, que en posteriores
etapas ya habrá acceso de Egos, de algunas personas que tengan el Ego?
R.- Sucesivamente, en las
posteriores etapas va surgiendo el Ego (dentro de los mismos seres humanos), va
comenzando a nacer el Ego entre los seres humanos. Esta es la cruda realidad de
los hechos. Afortunadamente existe una ley que se llama la Ley de la
Transmigración de las Almas (enseñada por el Señor Krishna en la India por ahí,
hace unos diez mil años antes de Jesucristo). La Doctrina de la Transmigración
de las Almas nos da basamento para la edad de Oro. Es claro que todos estos
millones (4.5OO millones de seres humanos que actualmente pueblan la faz de la
Tierra), no pudiendo disolver el Ego (porque no todos pueden hacerlo por falta
de capacidades o de consagración), pues la Naturaleza se encarga de
desintegrarlos. ¿Dónde les va a desintegrar la Naturaleza el Ego? Pues en los
mundos infiernos, para ese son los mundos infiernos, para eso es el Tartarus.
De manera que propiamente el infierno para los Sufis no es un lugar de castigo,
sino un lugar de purificación y de instrucción para la Conciencia; en cuanto el
infierno para nuestros antepasados aztecas, o sea, el Mictlán (así se le llama)
no es un lugar de castigo, sino un lugar de probación, de pruebas, y que si se
sale victorioso después de pasar por los nueve círculos dantescos, se tiene
derecho a entrar al paraíso.
De manera que considérese el
infierno desde ese punto de vista, no solamente como lugar de castigo, sino de
instrucción para la Conciencia, y depuración.
Significa esto, que en los mundos
infiernos o en los nueve círculos dantescos del Tartarus, el Ego se va
desintegrando, se va volviendo polvo (esa es la famosa Muerte Segunda).
Entonces, lo mejor, lo más decente, lo más digno, lo más aristocrático que
tenemos dentro (que es la Esencia), sale libre, a la luz del sol, para
reiniciar una nueva marcha. Empezará por el mineral, continuará en el vegetal y
en el animal, y posteriormente vuelve esa Esencia a reconquistar el estado
humanoide, que otrora perdió.
De manera que esto apliquémoslo a
los 4.500 millones de seres humanos que entrarán al Tartarus. Esos 4.500
millones saldrán del Tartarus un día, sin Ego; desprovistos de Ego, tomarán
cuerpos entre los descendientes del núcleo escogido, y a medida que vayan
tomando cuerpo, la raza se va aumentando (pero una raza inocente, porque no
tiene Ego), esa raza inocente, desprovista de Ego, será entonces cuidadosamente
dirigida por las Dinastías Solares.
P.- En esas infradimensiones,
¿pasara uno muchísimos padecimientos, horribles padecimientos y será larguísimo
pasar por cada uno de esos círculos?
R.- Sí, se sufre demasiado, porque
allí tiene que encontrarse uno cara a cara con uno mismo. Por ejemplo, uno ha
sido un asesino, o ha cometido crímenes, tiene el Yo del asesinato, entonces se
encontrará allí al Yo del asesinato frente a frente de uno, persiguiéndolo a
uno, un monstruo que lo buscará a uno, y uno se esconderá detrás de las rocas,
y el monstruo buscándolo a todas horas, y a toda hora el espantoso monstruo
armado, queriéndole matar a uno (y sin embargo no puede uno quitárselo porque
ese es uno también, es parte de uno mismo, es el Yo del homicidio).
Los Yoes de la lujuria lo acosarán
allí tormentosamente, verá múltiples monstruos de lujuria, que lo atacarán,
querrá uno quitárselos y no podrá, y los verá horripilantes y espantosos entre
las tinieblas del Averno, y sin embargo esos Yoes son de uno mismo, de manera
que allí la Consciencia se instruye. Como cátedra es de primera, porque la
Conciencia recibe una instrucción directa, formidable y se desintegra el Ego
con pleno conocimiento de causa, de manera que cuando la Esencia logra
liberarse por las puertas de la Muerte Segunda, pues hombre, sale completamente
feliz, y muy instruida a la superficie, a la luz del Sol.
Sale para reiniciar nuevos procesos
evolutivos que habrá de empezar por el mineral. Volverá a ser un Gnomo, pero ya
no sólo un Gnomo como al principio, como antes, detrás de los ciclos humanos,
si no ya un Gnomo de jerarquía, de categoría, debido a la espiral, y cuando
ingrese en los paraísos elementales del reino vegetal, será siempre un
elemental de cierta categoría vegetal, y cuando ingrese en los paraísos de los
reinos animales, será siempre un elemental de categoría, y cuando ingrese en el
estado humano, será con más Conciencia, pero inocente. Ese pueblo inocente del
futuro que pasó por la terrible Muerte Segunda, será gobernado por las
dinastías solares, y entonces vendrá la Edad de Oro; por eso Virgilio, el poeta
de Mantua exclama: "Ya llegó la Edad de Oro y una nueva progenie
manda". ¿Cuál progenie manda? ¿Cual es esa nueva progenie? Las dinastías
solares.
Será preciosa la Edad de Oro. El
evangelio de San Lucas, precisamente corresponde a la futura Edad de Oro (por
eso se le llama el evangelio según San Lucas, es el evangelio según la luz, el
evangelio solar).
En cuanto al evangelio de Mateo, es
el evangelio según la ciencia; y si leemos cuando va a ser esto, Mateo nos está
indicando: "Cuando viereis a Jerusalén rodeada de ejércitos". También
dice que cuando habrán por esa época pestes y terremotos y todas esas
cuestiones, es porque ya el tiempo ha llegado. Tenemos actualmente a Jerusalén
rodeada de ejércitos, terremotos por doquiera, pestes, epidemias, enfermedades,
hambre, eso es lo que estamos viendo; don Mateo según la ciencia nos está
diciendo que es para esta época.
Ahora, si miramos nosotros a grandes
rasgos a Daniel el profeta, el ve un gran mar, el océano, las corrientes,
combatiéndose entre sí, y surge primero un monstruo que lo mira dentro del mar,
una gran bestia y esa gran bestia resulta que tiene alas, es un gran león con
alas, y le fue dado corazón de hombre (la Edad de Oro). Y surge una segunda
bestia, parece un oso (la edad de plata); y surge una tercera que parece una
esfinge (la Edad de Cobre), y surge una cuarta bestia distinta a todas las
demás, porque es de hierro toda, sus dientes son de acero, sus uñas son de
hierro y todo lo holla con sus pies, es una bestia diferente a todas, la cuarta
bestia es la actual Edad de Hierro.
Es capaz de hacer caer los santos
del suelo y es capaz de destruir todo lo que encuentra a su paso.
Y llegó el justo dice, y llegó el
Cristo y se sentó, los libros fueron abiertos y fue entregado el reino a los
santos del altísimo, es decir, termina la Edad de Hierro con grandes
cataclismos.
Y cuando Daniel pregunta:
"¿Cuando será eso?" Le contesta: "Esto será dentro de un tiempo
y tiempos y la mitad".
Tiempo... ¿Cuál es el tiempo dentro
de un tiempo? La Edad de Oro. ¿Tiempos? Las edades de plata y cobre. ¿Y la mitad?
La mitad de la Edad de Hierro.
De manera que en estos momentos
estamos en la mitad (de acuerdo a cálculos orientales) de la Edad de Hierro;
entonces el fin es para esta época, porque la otra mitad la pasaremos entre el
caos y será dura.
Así pues que es tiempo, tiempos y la
mitad.
P.- Venerable Maestro, ahora que le
sigo la referencia sobre los monstruos y los mundos infiernos, resulta que
cuando tenía dos o tres años de edad, al momento de acostarnos a dormir veía
entre las paredes grandes monstruos que siempre me atacaban, mi padre me
regañaba porque siempre lloraba asustado, él decía que eran cosas mías, que no
había nada...
R.- No siempre. Por eso es que yo me
callaba tanto el pico cuando era muchacho, no le conté a nadie ni esto. La
diferencia entre ustedes y yo es que ustedes cantaron y yo no canté, yo me
callé el pico porque yo sabía demasiado que si cantaba me iban a tachar de
cuchufletas. Yo sabía que esos que me rodeaban, mi jefe, mi jefa (padres), mis
hermanitos, eran gentes completamente dormidas e inconscientes; como yo lo
sabía, porque había cambiado de cuerpo a voluntad, me había metido en este
cascarón a voluntad, entonces lo sabía yo demasiado bien. ¿Qué hice? Me callé
el pico, dije, "esta gente no me entiende ni papa, yo lo que voy es a
llevarles las aguas a esta gente, pero apenas crezca un poquito me los
melo". Esos monstruos son los que tú cargas dentro, los Yoes. ¿Ya los
desintegraste? Tienes que reducirlos a polvareda cósmica, son tus Yoes que
vienen desde los antiguos tiempos, desde los siglos antiguos que han pasado a
la historia; hay que volverlos polvo, reducirlos a ceniza, polvareda cósmica,
esa es la cruda realidad de los hechos, y en el Averno con ellos es que te vas
a encontrar. ¿Qué efecto te producían de niño?
Mucho terror Venerable Maestro.
Bueno, eso mismo lo vas a sentir
multiplicado al mil en el Averno, si no los vuelves polvo ahora, porque si tú
no los vuelves polvo ahora, la Naturaleza se encargará de ayudarte, de hacerte
la operación quirúrgica, pero eso sí, ella te traga entre sus entrañas, y allá
en las entrañas te hace la operación muy dura, muy difícil, te vas a encontrar
con ellos al desnudo, a calzón quitado, cara a cara, vas a ver qué haces tú con
ellos y tu sabes que eso no es nada agradable, vivir miles y miles de años ante
esos monstruos. Si a ratos te producían tales aflicciones cuando eras niño, que
tal en carne y a lo vivo, luchando, escondiéndote tú entre las rocas a ver si
te proteges, y por ningún lado hay una protección, esos son los tormentos del
Tartarus, por lo tanto te aconsejo que desintegres el Ego, y estúdiate mi libro
de Psicología Revolucionaria, es ese libro el que debe servirte de cabecera, es
ese el libro que debe ser reproducido por millares en toda la América y en el
mundo entero, es fundamental, sin eso no vale une nada, hay que desintegrar el
Ego, si no, no está haciendo nada, está perdiendo uno el tiempo miserablemente,
porque aun, pongamos el caso de que alguien por desgracia no haya acabado la
elaboración de los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, pero disolvió el
Ego, lo volvió polvo, ya con eso se salva de tener que bajar al abismo, ya con
eso tiene derecho a tomar cuerpo en la futura Edad de Oro; es claro. Pero si no
ha disuelto el Ego, aunque haya fabricado los Cuerpos Existenciales Superiores
del Ser y sea un hombre de verdad, no le dan entrada en la Edad de Oro, porque
ese hombre va ha hacer mucho daño, aunque sea un hombre, y hablo de hombres, no
de humanoides intelectuales, es decir, el que haya alcanzado el grado de hombre,
no le dan la entrada en la Edad de Oro.
La Edad de Oro es la edad del
Paraíso, está representada en el evangelio de San Lucas por el Toro Alado, es
el evangelio según la luz, el evangelio solar.
Para que entre alguien en la Edad de
Oro, ese alguien tiene que estar limpio de Ego. Va a ser la humanidad de la
inocencia.
Llega uno a quedar tan inocente que
ustedes ni remotamente lo sospechan (cuando uno destruye los Egos). Yo mismo me
quedé aterrado de cierto grado de inocencia que había logrado, que yo ignoraba
que lo había logrado, pero en la hora de la hora, me encontré conque ignoraba
cosas elementales que toda la humanidad conoce; eso es algo terrible.
P.- Escuchando sobre lo que usted
estaba hablando sobre reencarnación, hace poco, yo desde pequeño pensé que
había vivido en muchas épocas anteriores y que había sido líquido, agua o
planta. ¿A qué se debió esa inquietud?
R.- Ya tenías el conocimiento
interno, intuitivo y habías sido iniciado en otros siglos, en otras edades, y
obviamente llevabas ese conocimiento ahí adentro; debido a eso has podido tener
reminiscencias de esos antiguos conocimientos.
Ahora, también, uno de los que hemos
vivido eso: Yo por ejemplo. ¿Porqué hablo de la Doctrina de la Transmigración?
Es una doctrina revolucionaria, que estoy seguro que las escuelas estas
ultramodernas de Teosofía, pseudorosacrucismo barato, espiritiadera, maromera y
marometas y todas esas cosas que actualmente existen en el mundo, no lo
aceptan, rechazan la Doctrina de la Transmigración. La enseñó el Señor Krishna,
pero ni así la aceptan los teósofos. Pero si uno ha despertado Conciencia en la
vida, si alguna vez ha estado despierto, pues obviamente, tiene que reconocer
el crudo realismo de la Doctrina de la Transmigración de las Almas; eso es claro.
¿Pero saben en qué me baso yo para
la Doctrina de la Transmigración de las Almas? Me baso sencillamente en esto:
de que yo recuerdo perfectamente las fases de evolución e involución por las
que estuve pasando. Exactamente, tuve que desenvolverme en un planeta muy
antiguo que ni siquiera pertenece a la antigua Tierra-Luna, porque antes de
nuestra cadena terrestre existió la Cadena Lunar, antes de la Cadena Lunar
existió otra cadena; yo soy de una cadena muchísimo más antigua. En ese
planeta, evolucioné como evoluciona todo el mundo, empecé por el mineral,
vegetal, animal, alcancé el estado de humano que otrora perdiera, etc., etc.,
etc. Pasé por todas esas fases, pero al llegar al estado humano, se me
asignaron ciento ocho existencias (como siempre es lo normal), durante esas
ciento ocho vidas no me interesé siquiera en lo más mínimo, ni en lo más
insignificante, nada que se relacionara con la espiritualidad, me dediqué
exclusivamente a cosas terrenales, a cosas profanas, echando al olvido todo lo
que oliera a espiritualidad, no me interesaba, hasta que llegué a la última que
fue la ciento ocho existencia, en esa última ciento ocho tuve una vida, una
existencia dijéramos, de una personalidad malvada, la ciento ocho era una
personalidad de sexo femenino, malvada, una mujercita así (chaparrita), pero
perversa, era la última y es claro, entré a los mundos infiernos con ese cuerpo
que tenía, dejé ese cuerpo femenino, y entré a los mundos infiernos,
involucioné entre las entrañas de ese planeta, maldecía y blasfemaba, odiaba la
divinidad, era un ser perverso, hasta que pasé por la Muerte Segunda; me iba
desintegrando, volviendo polvo, todos mis Yoes iban quedando convertidos en
cascarones, se iban volviendo polvo, por último ya no quedó nada, al no quedar
nada, sentí como si falleciera para siempre, una gran aniquilación, luego me vi
a mí mismo convertido en un niño inocente, un niño. ¿Qué sucedió? La Esencia,
el Elemental había quedado libre de elementos subjetivos, los elementos
subjetivos de las percepciones habían sido eliminados, los agregados psíquicos
en su totalidad desintegrados, reducidos a polvareda cósmica por las fuerzas
centrífugas de aquel planeta.
Quedó pues, la Esencia libre desnuda
frente al Sol. Bueno, se le dio salida, los Devas la examinaron de pies a
cabeza, a ver si quedaba algún elemento indeseable dentro del interior, cuando
estuvieron convencidos de que no quedaba ningún elemento indeseable, entonces
los Devas me permitieron la salida por las puertas atómicas y salí a la
superficie de aquel planeta, ya libre y a la luz del Sol, un Sol hidrogenado
que iluminaba aquél planeta de aquel Sistema Solar, del cual hoy no queda ni
sus recuerdos, a lo mucho sus recuerdos en los Archivos Akáshicos.
Entonces ingresé en las evoluciones
del reino mineral, entonces me vi a mí mismo convertido en un Gnomo, pero ya no
un Gnomo como había estado antes, no, un Gnomo de tipo superior, mucho más
tarde a través de los siglos me gané el derecho a entrar en las evoluciones del
reino vegetal nuevamente. Fui Elemental vegetal, pero un Elemental más
consciente; luego pasé a los estadios del reino animal, donde evolucioné en
distintas criaturas animales, y por ahí hablo en mi libro de "Las Tres
Montañas" cuando pasé por aquel animalito que se llama Rana, andaba por
ahí, pues, dando saltitos a la orilla de un riachuelo de aguas cantarinas
puras, recordaba sí, no lo había olvidado, los terribles sufrimientos del
Averno y no deseaba volver al Averno jamás, por los horrores allí sufridos. Me
hice amigo sí, de los elementales de aquel río (un gran amigo) y cuando sentía
pasos de humanoide por allí, sabía que eran terriblemente perversos, me tiraba
al agua para evitar a los humanoides, pues sé que son malos, y así pasaba el
tiempo.
Mas tarde se me dio el derecho ya de
entrar en evoluciones superiores, pude ingresar en un mundo de peces muy
inteligentes que vivían en aquel mundo, me gustaba ir siempre a la retaguardia,
no a la vanguardia, a veces aparecía un monstruo, y recuerdo un monstruo tan
terrible que se almorzó a todos los de la manada, yo estaba en la retaguardia y
no alcanzó a devorarme a mí, a los otros se los tragó, y recuerdo como el
infeliz aquel, después de que se llenó la panza, dio la espalda y se retiró muy
tranquilo, yo quedé entre unos pocos sobrevivientes, y así vivíamos en el fondo
de los océanos como pez.
Mas tarde, ya ingresé en un reino de
anfibios que salían a tierra a tomar la del luz Sol, yo andaba entre la manada
con los anfibios, después, posteriormente, se me dio el derecho de tomar cuerpo
humano. Entré con promesas de no volver al abismo, había quedado en mi
Conciencia eso vivo, las torturas del abismo, los espantos, los horrores por
los que había pasado; entonces ya afuera, ya convertido en un ser humana, dije:
"Bueno, me voy a transformar en hombre, sé que soy un humanoide, pero me
voy a convertir en hombre". Encontré al Gurú, mi Gurú, él me instruyó en
los Misterios (precisamente) de la Vida y de la Muerte, conseguí con él la
clave, el secreto indecible, el Gran Arcano, trabajé en la Forja de los Cíclopes
porque él me orientó, fabriqué los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser,
mediante el cumplimiento del Deber Parlok del Ser, y realicé las magníficas
transformaciones, dijéramos, del esperma sagrada, del mercurio de los sabios, y
logré así, mediante el mercurio, hacer cristalizar los cuerpos (porque es muy
cierto que el esperma sagrado es el azogue en bruto). En Alquimia, al
transmutarlo se convierte en el mercurio, la energía sexual es el mercurio, es
el alma metálica del esperma, y ese mercurio a su vez que es energía que sube
por los cordones simpáticos hasta el cerebro, es fecundado por el azufre o sea
el fuego que despierta. La sal en sí es la materia prima de la Gran Obra, sal
hay en el esperma, la hay en los metales, la hay en el oro, la hay en todo,
entonces hay que sublimar la sal también.
Estoy citándote de cuando me hice
hombre por primera vez, estoy hablándote de un Sistema Solar muy antiguo, de
cuando por primera vez logré alcanzar el estado, dijéramos, de hombre
verdadero, en un mundo que ya desapareció, del cual no queda ni el polvo de los
siglos, de eso es que estamos hablando. Entonces, mediante las operaciones del
azufre y del mercurio sobre la sal, logré que sal, azufre y mercurio
cristalizaran en el Cuerpo Astral, me fabriqué un Cuerpo Astral. En una octava
más elevada, esa sal sublimada que sirvió de base para las operaciones del
azufre y del mercurio, cristalizó en el Mental, y posteriormente con esa misma
base logré la creación del Causal. Provisto de los cuerpos Físico, Astral,
Mental y Causal, entonces logré encarnar los principios étnicos anímicos (el
Pneuma de los Gnósticos) dentro de sí mismo y así me transformé (convirtiéndome
en hombre, me volví hombre, había salido del estado de humanoide). Ya
convertido en hombre, seguí trabajando, posteriormente alcancé otros estados,
llegué al estado Angélico, Arcángel, etc., etc., etc. Bueno, conclusión, para
no andarles con tantos rodeos, logré la integración con mi Logoi, me convertí
en el Gobernador del Planeta Marte y adquirí todos los poderes de los Cielos y
de los abismos, toda la sabiduría y todos los poderes universales.
Ustedes dirán, "¿bueno, si eso
es así, porqué ahora vive aquí entre los terrícolas?" Y voy a decirles
sinceramente, después continué viviendo en distintos sistemas solares, en la
pasada existencia estuve en la antigua Tierra-Luna, viví pues, entre los
selenitas, hice el Movimiento Gnóstico entre los selenitas, les hablé como les
estoy hablando a ustedes. Crearon una poderosa civilización los selenitas, viví
entre ellos, ahí terminé pues.
Eran muy crueles los selenitas, era
mucha gente. Había una religión terrible, peor que la católica, me juzgaron, me
condenaron a pena de muerte y me crucificaron; tal como les estoy diciendo. Al
iniciarse la Aurora de este Mahamanvantara presente, integrado con mi Dios
Interno, me convertí en el Espíritu viviente del Centro de Marte, pero mi Señor
Interior Profundo, comprendiendo que había necesidad de que adquiriera
cualidades de los terrícolas, que nosotros no tenemos por allá (ciertas
características como las que tiene el conde Saint Germain, las que tiene
Cagliostro, un diplomático, un político de esos), me mandó para acá, para
adquirir características que no tenía; conservaba características de inocencia
y sapiencia, pero no ese espíritu que tienen los Cagliostros Saint Germánicos,
maestros de aquí, de la Tierra (entonces me mandó para acá y al mismo tiempo se
podría ayudar). Ciertamente, me mandó, pero sí cometí un error, cuando la
revuelta aquella de los Angeles de la Lemuria, yo fui de los primeros de entrar
en la ola (no, fue la cuestión de la caída en la generación animal), en la
misma Lemuria logré levantarme y en la misma Lemuria logré otra vez el elixir
de larga vida, la Piedra Filosofal.
Con el cuerpo lemur viví en la
Lemuria y en la Atlántida, de manera que vi hundirse la Lemuria entre el fondo
de los mares y vi levantarse la civilización de la Atlántida, y yo mismo la vi
ser tragada por el océano.
Tengo todos eso conocimientos aquí,
y puedo hablar sobre la Lemuria y la Atlántida, no he perdido ningún
conocimiento, mi memoria está correcta.
En la meseta central del Asia cometí
otro error, volví a echar la piedra al agua, y eso me dio caída otra vez en día
sábado, entonces tuve que sufrir mucho sobre la faz de la Tierra hasta ahora,
en esta época que estoy acabando de fabricar la Piedra Filosofal otra vez, en
el 78 la tengo en mi poder, la gema preciosa. Así que en realidad de verdad, es
el motivo por el cual estoy aquí; claro, cuando ya entré en la parte superior del
trabajo en la Gran Obra, fui llevado al abismo por mi Padre, él me instruyó
desde el Planeta Marte y me metió tremenda regañiza, me dijo: "Tenías
todos los poderes del Universo, toda la sapiencia del infinito, toda la
sabiduría del Cosmos, sin embargo te lanzaste al precipicio, ¿porqué lo
hiciste?" Entonces mi respuesta fue: "Señor, reconozco mi error, pero
ya, qué puedo hacer, lo único que puedo hacer es pedirte perdón", y
ciertamente el Señor me perdonó, y entonces continué trabajando en la Gran Obra
(y estoy trabajando en la Gran Obra). ¿Con qué objeto? Con el objeto de poder
volver a tener la Piedra Filosofal en mi poder, el Carbunclo Rojo, la gema
preciosa; para el '78 la tengo en mi poder, el Carbunclo Rojo, cuando eso sea,
me iré para Europa, a comenzar mi labor, que irá a ser muy semejante a la de
Cagliostro en Europa; esa es la cruda realidad de los hechos. De manera que a
estas horas, pues es claro que conozco todos los proceses de la Transmigración
de las Almas, si hablo de la Transmigración de las Almas es porque yo la viví,
la conozco, estoy enseñando, pues, una doctrina rechazada por todos los
pseudoesoteristas y pseudoocultistas de la época, ellos no han pasado por esas
fases, no les ha tocado vivir la Transmigración de las Almas, ellos han vivido
en un mundo de distintas escuelas kalkianas, en esas escuelas kalkianas,
abundan las personalidades kalkianas, que nada saben y teorizan demasiado.
¿Qué se entiende por personalidades
kalkianas? Esas personalidades llenas de pseudoesoterismo, pseudoocultismo
barato.
A
mí no me interesan esas escuelitas pseudoesotéricas y pseudoocultista, a mí lo
único que me interesa es el águila y la serpiente, mi águila y mi serpiente. Mi
águila es el Señor Interior Profundo, y mi serpiente es la Divina Madre Kundalini.
Estoy establecido en Isis desde hace
varios años, vivo en Isis, es decir, fui devorado por la serpiente, soy una
serpiente, que articulo, que hablo, que explico, en fin, pero soy una
serpiente, porque fui tragado por la serpiente, por eso les digo a ustedes que
estoy establecido en Isis y lo único que me interesa es eso, pienso que lo más
importante en la vida es llegar al Superhombre.
Primero hay que crear al hombre y
luego alcanzar la estatura del Superhombre, el hombre es algo que hay que crear,
que todavía no existe, existe es el animal intelectual equivocadamente llamado
hombre. Una vez creado el hombre, hay necesidad de alcanzar la estatura del
Superhombre, eso es lo importante. El Superhombre es aquel hombre que ha
logrado la integración absoluta con la divinidad, que se ha integrado, que se
ha fusionado con su Dios, ese es el Superhombre.
Lucifer es escalera para bajar,
Lucifer es escalera para subir, esa es la realidad de los hechos. Si uno logra
vencer a Lucifer, que es el dragón, se apodera del Vellocino de Oro, es decir,
del tesoro. El tesoro está allá abajo en los infiernos, bajo tierra, los
tesoros se esconden bajo tierra, cualquier tesoro está bajo tierra, escondido,
y hay que excavar mucho dentro de la tierra para encontrarlo; las raíces del
Superhombre están abajo, en el abismo, en el precipicio, porque, ¿de donde saca
un árbol su vida? ¿No es acaso del interior de la tierra, del abismo? Podría un
árbol crecer mucho hacia arriba, pero sus raíces van cada vez más hondas hacia
abajo, mientras más sube el árbol, sus raíces van más para abajo y no puede
subir el árbol si sus raíces no bajan, así también, nadie podría subir al grado
del Superhombre, nadie podría, dijéramos, emanciparse o liberarse, convertirse
en un Dios, con poderes sobre el fuego, sobre el aire, sobre las aguas, sobre
la tierra, si no baja antes al fondo del precipicio, y allá tiene uno que vivir
entre los demonios, como demonio y entre los demonios.
Hay que aprender a caminar con los
dos pies, muchos hermanitos, sobre todo las personalidades kalkianas que tanto
abundan en las escuelitas ultramodernas de pseudoesoterismo y pseudoocultismo
barato, quieren caminar con un solo pie, no se dan cuenta que hay que caminar
con los dos pies, ignoran eso, quieren caminar con uno. Qué diríamos nosotros
de un saltimbanqui, por ejemplo, haciendo maromas sobre una cuerda, caminando,
y que quisiera mantenerse en equilibrio con un solo pie, ¿cómo caminaría con un
solo pie? Iría para abajo, así, nosotros también, el que quiera llegar a la autorrealización
íntima del Ser, tiene que caminar con los dos pies y no tenerle miedo a
Satanás, ni al infierno, ni al abismo.
El infierno se necesita, y Satanás
se necesita. ¿Qué haríamos nosotros sin Satanás, sin el abismo, de donde vamos
a sacar el tesoro, con qué impulso eléctrico va a trabajar uno en la Forja de
los Cíclopes?; eso hay que tenerlo en cuenta señores.
En la edad media existió una secta
que era la secta de los Satanianos, la Inquisición espantosa acabó con esa
secta, todos los miembros de esa institución fueron quemados vivos en la
hoguera. Pero, ¿a qué era que rendían ellos culto? Rendían culto pues, a
Lucifer. ¿Y quien es Lucifer? Pues la reflexión del Logos en nosotros, Christus
Lucifer o Christus Lucifer, sin el cual no puede haber jamás chispa eléctrica
para el trabajo en la Forja de los Cíclopes.
También existía otra secta en la
edad media, era la de los Cainitas, que rendían culto a Caín, la de los
Cainitas. Los quemaron vivos en la hoguera. Pero vamos a ver cuál era el
argumento de esa secta, la base, ese argumento era muy interesante: el fuego.
Caín al revés, ¿cómo se pronuncia? Inca, los Incas, los sacerdotes del fuego,
de manera que Caín significa sacerdotes del fuego, es el fuego sagrado en el
interior del hombre.
¿Y porqué Caín mata a Abel? ¿Quién
es Abel? Hay que buscar qué cosa es Abél y que cosa es Isabel. Aquí tiene uno
que apelar a todos los estudios, dijéramos, de las raíces del idioma, a la
etimología: Is Abel, Is una partícula que nos recuerda los misterios Isíacos, que
no es otra cosa sino el Buddhi, la Ginebra, de los Jinas, aquella a que
Lanzarote escanciara el vino entre las copas de Sukra y Malta (el Buddhi
interior), y en cuanto a Bel es el Alma Humana que es masculina, el Causal. E
ahí al Signo de Géminis dentro de nosotros: Isabel, los gemelos, el Alma
Espiritual que es femenina, el Alma Humana que es masculina.
El Intimo tiene dos almas, la una es
el Alma Espiritual que es Isis o Is (el Alma Espiritual, el Buddhi es femenina
y el Alma Humana que es masculina es el Causal).
Caín mata a Abel. ¿Quien es Caín? Es
el fuego. Mata a Abel. ¿Quien es Abel? El Alma Humana. ¿Con qué la mata? Con la
mandíbula de un burro. ¿Y qué es el burro? En Alquimia es el mercurio de los
sabios, el esperma sagrado, el azogue en bruto. Entonces, ¿qué sucedió?
Sencillamente que al derramarse el vaso de Hermes Trismegisto, el tres veces
grande Dios Ibis de Thot, el fuego sagrado bajó, al bajar, murió el hombre
espiritual, salió del Edén, perdió todos sus poderes. Por eso se dice que Caín mata
a Abel, o sea al Alma Espiritual con la mandíbula de un burro (el esperma
sagrado, porque lo derramó) y entonces el Alma Espiritual entró en la muerte
mística, perdió todos sus poderes, es decir, vino la salida del Paraíso. Bueno,
en eso se basa la doctrina de los Cainitas, fueron quemados vivos en la hoguera
de la Inquisición.
Luego viene otra secta gnóstica
también muy importante, que había en Europa, la secta de los Iscariotes,
partidarios de Judas Iscariote; también los quemaron vivos en la hoguera, sin
consideración ninguna, la Santa Inquisición dio cuenta de ellos. ¿Pero qué eran
los Iscariotes? Téngase en cuenta que Judas el apóstol del divino Nazareno, no
es como dicen, aquel traidor; esa es una calumnia que se levanta contra el
apóstol. Judas Iscariote es el mejor discípulo de nuestro Señor el Cristo, es
un gran hierofante que hizo un papel, se lo aprendió de memoria (es un Drama
Cósmico, un drama que se ha presentado en todas las épocas y en todas las
edades; el Drama Cósmico es el del evangelio crístico, ese drama lo trajeron
los Elohim a la tierra, vino de otras esferas), y Judas tampoco quería
representar ese papel, él quería el papel de Pedro, pero Jesús ya lo había
escogido para el papel de Judas, de manera que cada uno de los doce aprendió su
papel de memoria, es una obra de arte, una obra dramática, y cada uno tuvo que
aprenderse de memoria su papel y a Judas le tocó aprender ese papel y ensayarlo
muchas veces, y que coincidiera con las sagradas escrituras, tenía que ser
perfecto.
P.- Entonces Venerable Maestro, ¿al
cumplir Judas ese papel, no recibió Karma?
R.- Al contrario, Dharma por
millones, por toneladas. Judas Iscariote es un gran Maestro, él no quería ese
papel tampoco, él no hizo sino repetir lo que había aprendido de memoria, como
había que hacerlo, tenía que ser exacto, preciso, en el momento oportuno, todo
tenía que ser perfecto de acuerdo con el papel. Pero él no ha traicionado a
Jesús, jamás, es el mejor discípulo de Jesús, y no solamente hasta ahí llegó
Judas, sino que descendió al abismo y vive en los mundos infiernos. Yo vi que
lo colgaban, le ponían cuerdas, en el abismo (cuando yo entraba a visitar el
abismo), y se dejaba colgar, de una humildad única, que mató el Ego, él no
tiene Ego y allí vive en el abismo, ¿y haciendo qué? Luchando por salvar a los
perdidos, a los que no tienen ningún remedio, es como un rayo de Cristo perdido
en el abismo, sufriendo por los perdidos, es algo extraordinario, nadie sabe ha
donde ha llegado Judas. Si hay un hombre que se haya ganado el derecho de
entrar al Absoluto Inmanifestado, es Judas Iscariote; ninguno de nosotros sirve
para descalzar a Judas, ni yo mismo me creo capaz de descalzarlo, todavía no me
siento capaz de hacer lo que hizo Judas, yo no me siento capaz, no sé si alguno
de ustedes se siente capaz. Eso de vivir en el abismo renunciando a toda
felicidad, desprovisto de Ego, sin embargo, viviendo en el abismo tratando de
salvar a los perdidos (ni siquiera en el mundo físico), odiado por todas las
multitudes y toda esa cuestión, considerado como traidor, cuando lo único que
ha hecho es obedecer al Señor. Nadie ni remotamente sospecha el sacrificio de
Judas en la humanidad, es el único que no ha tenido honores, para él no ha
habido alabanzas, nadie lo ha alabado (que tan muerto estará su Ego), de manera
que es el mejor de los discípulos que tiene el Cristo.
Bien, y sin embargo, ahora, su
cuerpo de doctrina es extraordinario, lo Iscariotes habían estudiado el cuerpo
de doctrina de Judas: la muerte total del Ego. Todos los Misterios de Judas hay
que vivirlos en el Mundo Causal. Los misterios de Judas: la muerte absoluta del
Ego animal (que no puede quedar nada del Ego, puesto que Judas como Maestro no
dejó nada de Ego, renunció a todo le que sepa a felicidad y vive en el abismo
entre los perdidos, el mejor de los discípulos del Señor, es el más grande de
los sacrificados, el que tiene más derecho a la felicidad y vive en el abismo,
entre los réprobos, entre los que no tienen remedio, está allí, únicamente por
amor a la humanidad, tratando entre las tinieblas de buscar a alguien que
quiera la luz, cuando logra encontrar a alguien arrepentido, él va a instruirlo
y si logra sacarlo, lo saca del abismo, eso hace Judas, de manera que condenar
a Judas es el peor de los delitos, al que tenemos que condenar es al Judas
interior, ese es su cuerpo de doctrina).
Ese traidor que vende al Señor por
treinta monedas de plata, que no es otra cosa sino que lo cambia por los
placeres, los licores y todas las cosas del mundo, a ese es al que hay que condenar
y juzgar, y Judas nos indicó eso con su doctrina, esa es su doctrina, la
doctrina de él es la más profunda, la muerte absoluta del Ego. Si hay un hombre
que merezca reverencia es Judas Iscariote; la secta gnóstica de los Iscariotes
en Europa fue perseguida por la Inquisición, todos los miembros de la secta de
los Iscariotes fueron quemados vivos en las hogueras que ardían en Europa, de
manera que van viendo ustedes cosas terribles, verdad.
Quiero decirles a ustedes en forma
enfática que los humanoides que habitan en la faz de la Tierra, son maquinitas
encargadas de captar determinados tipos y subtipos de energía cósmica que luego
transforman automáticamente y retransmiten a las capas anteriores del organismo
planetario, y gracias a eso puede vivir el planeta Tierra, de manera que el
animal intelectual está puesto única y exclusivamente al servicio de la
economía de la Naturaleza, ese es su único objetivo: la economía de la
Naturaleza.
Ahora bien, sin embargo el Sol no es
cruel. El Sol a depositado además los gérmenes para el hombre en las glándulas
de esas maquinitas, esos gérmenes pueden perderse (lo normal es que se
pierden), pero si uno coopera con el Sol, si uno de verdad coopera con esa
astro rey, entonces esos gérmenes se desarrollan y desenvuelven y surge un
hombre dentro del animal intelectual, en la misma forma que dentro de la
crisálida se forma la mariposa que un día sale y vuela. De manera que lo
interesante es cooperar con el Sol y una de las formas más grande de cooperar,
consiste en no alterar el suelo en que esos gérmenes tienen que desarrollarse.
P.- ¿El suelo?
R.- Sí, me refiero al suelo, al
terreno, mejor dijéramos, éste terreno donde los gérmenes tienen que
desarrollarse, que no es otro ese terreno que precisamente el mismo cuerpo humano.
Si se alteran las glándulas, si se
somete la gente a cuestiones de trasplantes de animales, si se presta uno a
ensayos con glándulas, que le cambien glándulas humanas por glándulas de mono o
a los tratamientos con Tiroxina para adelgazar y cosas así por el estilo, el
resultado es que los gérmenes no pueden desarrollarse, y el experimento
fracasa.
Cuando una raza se vuelve demasiado
mecanicista y pierde todo interés por las ideas solares, por la inteligencia
solar, el Sol a su vez pierde todo interés por esa raza y la destruye, ya no le
sirve para su experimento. Y tiene razón el Sol, mucha razón, porque él ha
creado esta delicada película de la vida orgánica en la costra terrestre, un
trabajo para él muy detallado, muy minucioso y es justo que saque su
recompensa, una cosecha de Hombres Solares, tiene derecho a sacar esa
recompensa, una cosecha de Hombres Solares; de manera que si una raza no le
sirve, la destruye, lo que está sucediendo con esta raza actual, no le sirve,
entonces la va a destruir, la destruye porque no le sirve para su experimento,
de manera que entonces hay necesidad de cooperar con el Sol para que el hombre
nazca adentro. Ahora bien, hay un códice de Anáhuac que leí, que dice:
"Los Dioses crearon a los hombres de madera y luego los fusionaron con la
divinidad", pero luego añade el mismo códice: "No todos los hombres
logran fusionarse con la divinidad". De manera que crearlo uno es una
parte, fusionarlo con la divinidad es otra parte; cuando el hombre se fusiona
con la divinidad, se transforma en Superhombre, entonces, sí nace el
Superhombre, pero hay que fusionarlo con la divinidad. Ahora, no siempre se
fusiona con la divinidad, no se fusiona con la divinidad cuando no elimina los
elementos indeseables que carga dentro, o sea, los defectos psicológicos: la
ira, la codicia, la gula, el orgullo, la pereza y etc., etc., etc., y otras
tantas yerbas.
Mientras no se eliminen esos
elementos indeseables que en nuestro interior cargamos, no es posible la
integración con la divinidad, y si no se integra con la divinidad, entonces se
convierte en Hanasmussen con doble centro de gravedad, en un aborto de la Madre
Cósmica, en un fracaso.
Son muchos los Hanasmussen que hay,
que han fracasado. Se ha creado al hombre pero no se ha logrado la integración
con la divinidad. ¿Ustedes han comprendido a fondo, pues, lo que son los
Hanasmussen?
Bueno, ahora especificando más esta
cuestión de los Hanasmussen, vale la pena conocerlos. Hay cuatro clases de
Hanasmussen. La primera clase de Hanasmussen son los individuos que solo poseen
el cuerpo planetario y nada más. ¿Ustedes saben lo que es el cuerpo planetario?
El físico, más allá de lo que hay en ellos es el Ego, no tienen más, y la
Esencia embotellada entre el Ego, entonces son sujetos que debido a las actividades
del Ego y algo de magia negra, crean una substancia, dijéramos, fatal que es
prácticamente la de Hanasmussen. Bueno este primero es mortal porque a la hora
de la muerte todos esos Yoes desencarnan y quedan en los mundos internos, pero
la substancia esa de Hanasmussen sigue existiendo un tiempo, más no causa mayor
daño debido a que no tiene los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, no hay
un centro focal, no hay un centro de gravedad permanente, son mortales estos
Hanasmussen, se desintegra la substancia y el Ego retorna como siempre a nuevos
cuerpos físicos.
Pero hay una segunda clase de
Hanasmussen que crearon Cuerpo Astral, que lo tienen pero no crearon ningún
otro vehículo, únicamente fabricaron el Astral. Pues esta clase de individuos,
obviamente, si no eliminan lo que tienen de Hanasmussen, hechicería, la magia
negra y todas esas cosas, entonces no queda más remedio que se reincorporen en
organismos animales, perros, caballos, gatos, etc., etc., etc., tienen que
seguir tomando, cuerpos animálicos, hasta que eliminen lo que tienen de
Hanasmussen.
Hay una tercera clase de Hanasmussen
que son los hombres verdaderos, pero que no eliminaron el Ego; eso es lo que
podríamos llamar Hanasmussen con doble centro de gravedad. Tienen dos
personalidades, una divinal, vestida con los Cuerpos Existenciales Superiores
del Ser, la otra, pues, terriblemente maligna, formada por el Ego, por el
abominable Organo Kundartiguador desarrollado en los Chacras; estos son
Hanasmussen muy peligrosos. Si no eliminan lo que tienen de Hanasmussen no les
queda más remedio que pasar por la Muerte Segunda en los mundos infiernos.
Por último, existe una cuarta clase
de Hanasmussen, Dhyani Bodhisattvas caídos. Yo era una cuarta clase de
Hanasmussen cuando andaba caído, era una cuarta clase, entonces tenía formada
dos personalidades definidas, a una divinal y la otra tenebrosa. Pero la cuarta
clase conserva la memoria de los siglos, la Conciencia despierta, siempre;
sufren mucho, lo indecible, hasta que logran levantarse, la cuarta clase, pero
si no se levantan, no les queda más remedio que entrar en las regiones
sumergidas de los mundos infiernos hasta la Muerte Segunda. De manera que son
cuatro clases de Hanasmussen, cuatro clases.
P.- ¿Entonces en el mundo común y
corriente van mejor los individuos que no hicieron nada a favor de ellos?
R.- Pues esas son maquinas al
servicio de la economía de la Naturaleza, y gracias a esas maquinitas, la
Naturaleza está recibiendo alimento suficiente. Y son maquinas al servicio de
la Naturaleza y como maquinas son útiles y se necesitan para alimentar al
planeta tierra.
Bueno, de manera que ustedes han
entendido bien toda esta cosa de lo que son los Hanasmussen, y eso es muy
importante saberlo. Uno en este camino, tiene que andar muy conscientemente,
¿no?, tener los conocimientos completos.
También hay casos muy graves, muy
graves, voy a decirles, muy graves. Por ejemplo, tenemos un caso como el de
Moloch. Me propuse investigarlo. Descendí a los mundos infiernos con el
propósito de investigarlo, lo llamé allí con la gran llamada de Pedro de Apono,
y vino sobre un brioso corcel a través de la llanura roja, hablando en términos
dantescos. Entonces sus palabras fueron estas: "Oh, Samael. Yo te hacía
por allá arriba con los angelitos, ¿y conque estas tú aquí abajo también? Mi
respuesta: "Te equivocas Moloch, yo no vivo aquí abajo, únicamente he
bajado a investigarte, y eso es todo". Se volvió y se fue en su brioso
corcel, pero sí logré investigarlo (el sarcasmo con que dijo, "yo te hacía
allí arriba con los angelitos"). Para él los angelitos le valían poco mas
o menos sombrillas, eran algo así como libritos Kinder, me di cuenta, pude
evidenciar de aquel hombre que estaba en una empresa más grande. Investigando
supe que era un Trono, es el Bodhisattva de un Trono, nada menos. Un Trono, un
Trono caído; Moloch.
P.- ¿De los Cuatro Tronos?
R.- No, otro distinto. Uno de los
tronos caídos.
¿Qué busca este hombre si es un Trono, y
porqué habla con ese sarcasmo sobre los angelitos, qué es lo que busca este
hombre? Traté de saber algo más sobre él, y vine a darme cuenta, a la
conclusión; obviamente pasará por la Muerte Segunda, con la destrucción del Ego
y de los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, vivirá posiblemente millones
de años más en el abismo, pero al fin se desintegrará atómicamente y la Esencia
resurgirá a la luz del Sol para recomenzar la nueva jornada, en un octava
superior, de acuerdo con la ley espiral de la vida. Entonces vendrá a ser un
Gnomo de tipo superior, jerárquico, que estudiará detenidamente con su
Conciencia las leyes que rigen al mundo mineral. Y cuando ingrese en los
paraísos vegetales será un Gnomo que estudiará a fondo la ciencia del vegetal,
la practicará y aprenderá a manejar las leyes del vegetal, un elemental vegetal
inteligentísimo, jerárquico. Y cuando ingrese en la evolución animal, será un
elemental animal con capacidad para estudiar las leyes del mundo animal y
aprenderlas a manejar. Cuando reingrese al estado humano, que otrora perdiera,
volverá a ser otra vez un hombre super consciente (no, dijéramos, al estado de
humanoide), una especie de humanoide super consciente, y luego como hombre,
cuando fabrique los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, creará Cuerpos
Existenciales aún superiores, por el conocimiento y la maestría, y cuando
reingrese a su Dios, que es un Trono, se habrá elevado a Cosmocrator, habrá
aprendido a crear mundos y a manejar leyes. Eso fue lo que vine a descubrir y
vine a descubrir (que ese procedimiento lo usan los Dioses que quieren ir
subiendo en grados). Por eso es que en alguna ocasión dije: "Los Dioses
antes fueron demonios, los Dioses mas grandes antes fueron diablos". Dije
en la "Revolución de Bel": "Los demonios se convierten en
Dioses". Ese es uno de los grandes misterios, estoy divulgando nada menos
que el secreto del abismo.
Yo por mi parte les diré a ustedes,
con franqueza: alcancé gracias a mi Dios Interno, el grado aquel de
Cosmocrator, con bajadas al abismo, pero sólo anhelo ahora una sola cosa,
apartarme del camino ese de Cosmocratores si mi Padre así lo quiere, y seguir
el camino al Absoluto. ¿Por qué? Porque, por ejemplo, veo al Dios Sirio.
¿Cuantas veces el Dios Sirio descendió al abismo, cuántas veces pasaría por la
Muerte Segunda para llegar a ser ahora el gobernador de la Vía Láctea? Entonces
es un camino en el que se enreda uno en el Karma de los mundos. Por lo tanto,
es preferible llegar al Absoluto.
¿Y qué es el Absoluto? Se le puede
tratar desde el punto de vista del Medio Oriente, a lo Turcomano, o a lo Armenio,
o a lo Persa. Prefiero pensar en el Eterno Padre Cómico Común, que es menos
frío que el punto de vista de las sustancias de Sian; el Eterno Padre Cósmico
Común, el omnimisericordioso, la infinitud que todo lo sustenta. Claro, llegar
uno a fusionarse con su Dios Interno para convertirse uno en un verdadero
Superhombre, en un verdadero Kumarat, pero posteriormente integrarse con el
Eterno Padre Cósmico Común, el Elohim inefable, el Ain Soph Aur o el Ain, el
Eterno Padre Cósmico Común, la infinitud que todo lo sustenta. Al llegar a ese
punto se dice de uno que ha logrado el Sagrado Anklad, pero permanecer dentro
del seno del Eterno Padre Cósmico Común, es lo difícil, porque bastaría el
anhelo de siquiera un segundo, el anhelo de ser algo o alguien, o el de existir
en cualquier forma, en cualquier mundo, de ser algo, para inmediatamente
desprenderse del Eterno Padre Cósmico Común y caer en el mundo de las tres
leyes, en el Reino del Demiurgo Creador. De manera que permanecer en el seno
del Eterno Padre Cósmico Común es lo difícil.
Tenemos ante nosotros dos caminos:
ante los que siguen la directa, el camino de convertirse en Cosmocratores, o el
de perderse dentro del seno del Eterno Padre Cósmico Común.
Yo diría, ¿para qué ser cada vez más
y más jerárquico entre el polvo de los mundos? Mejor es perderse dentro del
seno del Eterno Padre Cósmico Común, que tiene todos los poderes y atributos y
toda la felicidad. Este es un planteamiento que les hago a ustedes sobre los
caminos, y es muy importante; de manera que los Dioses han sido demonios.
En todo case los Dioses fueron
diablos, y muchas veces un Dios jerárquico como el Dios Neptuno se lanza al
abismo para resurgir mas adelante, mas poderoso (Neptuno una vez se dejó caer).
Pero bueno, hay Dioses que bajan al abismo intencionalmente y se confunden con
los demonios, y se desintegran, y se vuelven polvareda cósmica. Dioses que se
caen, que se precipitan en el Averno, mas tarde, adelante, resurgen mas
poderosos que antes. El alquimista también tira la piedra al agua, mas adelante
le da la vida y es mas poderosa que antes; eso es obvio.
Bueno, y hay cierta razón, por
ejemplo, en el Marqués de Sade, que pensaba en la liberación por el mal, en
cierta manera tenía razón. Obviamente, al pasar por la Muerte Segunda el perverso,
la Esencia queda liberada; eso es obvio. Pero que horrores y que sufrimientos,
y todo, ¡la pasada por el Averno es espantosa, espantosa!, y sale al otro lado,
pasando por los nueve círculos dantescos.
P.- Bueno, y debe haber algo en la
sabiduría de los círculos, porque no solamente uno ve en el camino de la luz,
en el camino material yo he visto a muchos Elementales de la Naturaleza
describir círculos bellos sobre mí, unos de defensa, otros de protección, otros
de información, círculos bellísimos.
R.- Así es, Elementales son todo el
mundo, todo el que no ha alcanzado el estado de hombre es un Elemental
embotellado entre los Yoes, pero Es un elemental. Si se destruyen los Yoes,
queda el puro Elemental, el mismo que comenzó como mineral y como vegetal y
que siguió como animal; pero es el mismo. Al destruirse los Yoes queda el
Elemental, eso es: un Elemental y nada más.
P.- Yo pienso que hoy forman parte
como Elementales, como Gnomos de la tierra, como Ondinas y Nereidas, como
Silfos y Sílfides, que están en ese estado paradisíaco, tienen una gigantesca
sabiduría e informan y dirigen acontecimientos.
R.- Si lo tienen porque está la
Conciencia despierta, los Elementales son despiertos. Pero lo que quiero
decirte es esto: un Elemental metido en cuerpo humano o metido entre una planta
o metido entre un animal o viviendo en el mundo de las rocas, es el mismo
Elemental. Yo lo he visto en los experimentos: por eso el sujeto XX, un
caballero que me escuchaba en el viejo Egipto de los Faraones (no era un Iniciado,
ni muchos menos, pero sí aceptó la doctrina de desintegrar a los Demonios Rojos
de Seth, como decíamos en el Alto y Bajo Egipto, es decir, los Yoes). Hizo
parte del trabajo en vida, desintegró el 50%, dijéramos, y después de muerto,
recibió instrucción, le enseñamos como se cierran las matrices, de manera que
después de muerto cuando aulló el Huracán del Karma horriblemente, él
permaneció sereno, impasible; cuando los demonios tenebrosos lo atacaron con
furia, él permaneció sereno, impasible; cuando la tempestad sobre su cabeza
llovía con rayos y truenos, impasible; cuando llegó a cierto lugar donde
copulaban hombres y mujeres, sereno, sin simpatía por nadie, ni antipatía por
nadie, no buscó refugio en ninguna cueva en medio de la tempestad, porque sabía
que buscar refugio en la tempestad equivalía a quedar prisionero dentro de
alguna matriz (esa cueva sería alguna matriz); no buscó refugio en nada ni en
nadie, por ultimo su Padre Madre le sometió a terribles pruebas, permaneció
firme. Los sacerdotes del templo le daban la ayuda recordándole su propósito
que era el de no volver más al mundo. Al fin y al cabo se le admitió en un
reino de esos tantos reinos que hay en el Mundo Molecular, como el Tlalocalo,
como el Reino de los Cabellos Largos o el de la Gran Concentración. En
distintos reinos que hay allí, al fin y al cabo se le admitió en uno de esos
tantos reines, y allí su Madre Divina le ayudó a eliminar los Yoes que le
faltaba eliminar, y al fin la Esencia fue quedando libre, y fue tomando una
actitud muy hermosa: Primero como el de una doncella de catorce o doce años,
después tomó la forma de una niña muy hermosa, por ultimo, convertido en un
simple Elemental femenino hermosísimo (tomó ese aspecto así), se sumergió entre
el Gran Alaya del Universo, como simple Elemental.
Aquí también, en el antiguo México,
muchos Iniciados hacían la misma, y se apartaban del escenario, no volvían a
tomar parte, es decir, Elementales que no les interesaba más tarde alcanzar
estaturas de hombres ni de Dioses, ni de nada, sino que se quedaban siendo
elementales dentro del gran seno del Universo. Algunos del antiguo México lo
hicieron intencionalmente, con el propósito de volver en la Edad de Oro, para
entrar en una Escuela de Misterios y convertirse en Adeptos calificados. En
tanto se apartaron de las evoluciones y de las involuciones, y se retiraron del
escenario cósmico y se sumergieron entre el Gran Alaya del Universo, mediante
ese procedimiento nada más.
P.- Venerable Maestro, ¿entonces
esos Elementales en la Edad de Oro podrán regresar a tomar cuerpo?
R.- A tomar cuerpo si es su voluntad
y entonces crear los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, convertirse en
hombres, más tarde en Adeptos y en Dioses. Pero muchos de esos prefirieron
aplazar y algunos de ellos sencillamente no quieren ser hombres, ni Dioses, ni
nada, sino sencillamente quiere quedarse para siempre en toda Eternidad, como
simples Elementales sumergidos en el Gran Alaya del Universo.
De manera que hay de todo, hay
individuos que han pasado por todos los ciclos de manifestación, por los tres
mil ciclos y que jamás crearon los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, ni
hicieron el trabaje sobre sí mismos; esos al fin terminaron sus tres mil ciclos
de manifestación, se van, se sumergen dentro del Espíritu Universal de Vida
como simples Elementales. Elementales con conocimientos del bien y del mal,
pero Elementales.
Ser hombre es algo muy distinto.
Cuando uno se convierte en hombre, sí deja de ser Elemental. Para convertirse
en hombre, hay que crear los cuerpos, haber hecho todo el trabajo sobre sí
mismos, haber desintegrado el Ego, haber creado vehículos, haber hecho de todo.
Pero hay muchos que prefieren quedarse como simples Elementales. Así pues, les
he mostrado a ustedes distintos tipos de gente.
Yo sigo el camino de la directa, que
es el camino más exaltado, pero también es el más difícil y el más peligroso;
marcho por eso camino, la directa.
P.- Venerable Maestro, ¿por el
camine espiraloide también se puede llegar a hombre?
R.- El espiraloide no lo pueden
coger sino los hombres, únicamente los hombres. Cuando alguien se convierte en
hombre, tiene ante sí los dos caminos, el del espiraloide que es nirvánico
ciento por ciento (que los Nirvanis rara vez toman cuerpo físico) y el de la
directa que va directo al Seno del Eterno Padre Cósmico Común. Claro que los
que se van por la espiraloide tampoco llegan a tener los mismos triunfos que
tiene el que se va por la directa, no señores, tiene menos peligros.
El camine directo, por ejemplo, es
tan terrible, que muy pocos lo pueden seguir. Se aparta de las leyes de la
evolución, de la involución, se revolucionan contra todo y contra todos, es un
rompecabezas por todas partes, un camino de espada en mano contra sí mismo,
contra el mundo, contra todo. Es la doctrina del Cristo Rojo en marcha, de un
Cristo rebelde que nada tiene de mentecato ni de mojigato, como el de las
iglesias parroquiales, sino un Cristo revolucionario y terrible, ese es el
camino de la directa, muy pocos lo pueden seguir.
P.- Venerable Maestro, ¿el Cristo
Rojo de los que cogen la directa, al final es el mismo Cristo del que coge el
camino espiraloide?
R.- Bueno, indudablemente que el
Cristo siempre es el Cristo, pero es que dijéramos, los de la directa adquieren
ciertos poderes, ciertas cualidades, ciertos atributos esotéricos profundos que
no logra jamás el que va por el camino espiraloide.
El de la espiraloide se la pasa
gozando del Nirvana, rara vez toma cuerpo. El de la directa renuncia a toda
felicidad, se queda aquí abajo en carne y hueso, viviendo como hombre entre los
hombres, luchando, sufriendo durante todo el Mahamanvantara, a ver si logra al
final del Mahamanvantara sumergirse dentro del seno del Eterno Padre Cósmico
Común para siempre, y si no, le toca volver a seguir el mismo camino, hasta que
al fin en cualquier Mahamanvantara lo logre. Yo he venido siguiendo este camino
durante varios Mahamanvantaras y todavía no lo he logrado, y voy por la directa
y no lo he logrado.
P.- ¿El Maestro Jesucristo lo logró?
R.- Bueno, él sí lo logró, pero yo
no lo he logrado. A ver si lo logro, no lo sé. Por mi parte he resuelto
renunciar a toda felicidad arriba y abajo, y quedarme aquí como se dice a
calzón quitado, a trabajar por la humanidad terriblemente, renunciando a toda felicidad,
a todo paraíso, y a toda dicha. Es bastante duro eso, ¿verdad?
Para efecto, para poder continuar
por la humanidad, no me ha quedado mas remedio que reencarnarme, pues
actualmente estoy en proceso de reencarnación. No necesito pasar por la reencarnación
como la pasan todos los seres humanos, común y corriente; no, yo la paso en
vida. La vida mía como Víctor Manuel Gómez no dio mas que cincuenta y ocho
años, yo morí a la edad de cincuenta y ocho años, ya Víctor Manuel Gómez no
existe, se murió el año pasado. Ustedes dirán: "que raro eso". No,
desde entonces comencé a reencarnarme en mi cuerpo egipcio, y se comenzó un
intercambio atómico entre el vehículo de Víctor Manuel Gómez y el cuerpo
egipcio que está metido dentro de un sarcófago bajo una pirámide. Comenzó un
intercambio molecular atómico muy interesante, ese intercambio molecular
atómico permite que todos los átomos queden allá metidos en Egipto, en el
sarcófago, y que todos los átomos de la momia queden aquí. En una palabra, si
ustedes por ejemplo, hicieran un experimento, un átomo tuyo se desprende, por
ejemplo, aquí, de tu brazo y pasa aquí al brazo de nuestro hermano Quintero, a
su vez de ahí, del brazo del hermano Quintero, del mismo punto exacto, se desprende
el átomo, donde el átomo tuyo ha de ser colocado y regresa y se ocupa el lugar
vacío, y así se la pasan entre un intercambio atómico entre ustedes dos,
terminas vestido con el cuerpo del hermano Quintero, y el hermano Quintero
termina vestido con tú vehículo; eso es obvio. Es un intercambio atómico.
P.- En una de sus primera obras nos
relata usted Venerable Maestro, el caso de un Maestro que también tuvo que
realizar este trabajo...
R.- Sí, en una forma similar, pero
no igual, porque yo el intercambio atómico lo estoy realizando con mi propio
cuerpo egipcio que está vivo entre un sarcófago (vivo, en estado de
catalepsia). De manera que yo estoy intercambiando los átomos, reencarnándome
en mi propio cuerpo egipcio. Hoy por hoy, esotéricamente se dice que tengo un
año de edad.
P.- Venerable Maestro, ¿ese
sarcófago se encuentra oculto?
R.- Sí, está bajo una pirámide y
tengo mi cuerpo egipcio allí. Ya por la menos tengo parte de la cabeza egipcia,
y todo el cuerpo está sometido a intercambio atómico constante, de momento en
momento, de segundo en segundo. Cuando tenga dos años se notará un poquitico
más, cuando tenga siete años se notará más la cosa. Cuando cumpla la edad de
veintiún años... mayoría de edad. Verán el egipcio completo y totalmente
completo a la edad de treinta años, entonces todo el cuerpo egipcio estará acá
y todo el cuerpo de Víctor Manuel Gómez, habrá quedado en Egipto, en el lugar
del sarcófago, entre el sarcófago. Este intercambio atómico en esoterismo se
dice reencarnación, me estoy reencarnando en vida para poder quedar con el
cuerpo egipcio trabajando en favor de la humanidad por tiempo infinito, durante
todo el Mahamanvantara.
SAMAEL AUN WEOR
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